10 consejos para lidiar con el estrés de fin de año

Depresión o ansiedad, dolores de cabeza, cambios en el sueño, insomnio, trastornos gastrointestinales, nerviosismo o irritabilidad, palpitaciones y contracturas musculares son signos de estrés. Aceptar los propios límites y sentimientos, planificar con anticipación y buscar apoyo pueden ayudarnos a evitar el estrés para transitar con mayor calma el período de las fiestas.

Si alguien cercano a ti ha muerto recientemente o no puedes estar con tus seres queridos, date cuenta de que es normal sentir tristeza y dolor. Está bien tomarse el tiempo para llorar o expresar los sentimientos. No puedes forzarte a ser feliz sólo porque es la temporada de festividades.

Si te sientes solo o aislado, busca eventos comunitarios, religiosos u otros eventos sociales. Pueden ofrecer apoyo y compañía. También, ofrecer voluntariamente tu tiempo para ayudar a otros es una buena manera de levantar el ánimo y ampliar las amistades.

Las fiestas de fin de año no tienen que ser perfectas o simplemente igual que el año anterior. A medida que las familias cambian y crecen, las tradiciones y los rituales también cambian. Puedes elegir algunos que te gustaría mantener, pero es importante que estés abierto a crear nuevos. Por ejemplo, si tienes hijos adultos y no pueden ir a tu casa, busca nuevas formas de celebrar juntos, como compartir fotos, correos electrónicos o videos.

Trata de aceptar a los familiares y amigos tal como son, incluso si no cumplen con todas tus expectativas. Guarda las quejas hasta un momento más apropiado para la discusión. Y sé comprensivo si otros se molestan o se angustian cuando algo sale mal. Lo más probable es que también sientan los efectos del estrés y la depresión en las fiestas.

Antes de ir de compras de regalos y alimentos, decide cuánto dinero puedes gastar. Luego, cumple con el presupuesto. No trates de comprar la felicidad con una avalancha de regalos. Puedes probar también con intercambiar regalos hechos en casa o donar a una organización benéfica en nombre de alguien.

Reserva los días específicos para ir de compras, cocinar, visitar amigos y otras actividades. Planea el menú y luego haz su lista de compras. Eso ayudará a evitar luchas de último minuto para comprar ingredientes olvidados. Y asegúrate de contar con ayuda para la preparación de la fiesta y la limpieza.

Decir que sí cuando deberías decir que NO puede hacerte sentir resentido y abrumado. Los amigos y colegas entenderán si no puedes participar en cada proyecto o actividad. Si no es posible decir que no cuando tujefe te pide que trabajes horas extras, intenta eliminar algo más de tu agenda para compensar el tiempo.

No dejes que las fiestas se conviertan en un exceso, en particular de comidad y bebidas alcohólicas. Prueba con estas sugerencias: come bocadillos saludables antes de los festejos para no excederte con los dulces, quesos o bebidas; duerme lo suficiente y no olvides incorporar actividad física regular cada día.

Tómate un tiempo para ti. Pasar 15 minutos a solas, sin distracciones, puede refrescarte lo suficiente como para manejar todo lo que necesitas hacer. Encuentra algo que reduzca el estrés y logre despejar tu mente y restaurar la calma interior. Algunas opciones pueden incluir: dar un paseo por la noche y observar las estrellas o escuchar música relajante.

Busca ayuda profesional si la necesitas. A pesar de tus mejores esfuerzos, puedes sentirte triste o ansioso, con molestias físicas, incapaz de dormir o irritable. Si estos sentimientos perduran un tiempo, habla con tu médico o con un profesional de la salud mental.