La Navidad y las fiestas de fin de año pueden hacernos sentir falta de tiempo y un poco de agobio, pero no deja de ser un período de celebración. Sin embargo, para muchas personas es una época de depresión y tristeza. ¿Qué podemos hacer para evitar que una época de celebración se torne un sufrimiento? ¿Qué cosas disparan estas emociones negativas?
Tu salud física y mental pueden verse dañadas en la época del año donde todo es color y celebración. Sentimientos de depresión pueden incrementarse en esta temporada. La denominada "depresión navideña" no es más que una depresión común caracterizada por una gran tristeza y una visión negativa de todo aquello que le rodea al individuo, por lo cual realizar cualquier actividad resulta difícil de ejecutar.
¿Por qué la depresión?
Uno de los motivos que señalan los expertos son los recuerdos de otras navidades por ejemplo, con parejas , amigos o seres queridos, que tienden a idealizarse. También está el tema de la soledad y el aislamiento que puedas sentir, no saber con quién reunirte a celebrar. El fallecimiento de un ser querido durante este año, las primeras fiestas sin esa persona, es un motivo de dolor y tristeza que puede acentuarse en esta época.
Navidad y suicidios
Acorde a estadísticas de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) los suicidios en Navidad son un mito más que una realidad, ya que diciembre sería el mes con menor índice de suicidio en Estados Unidos. Sin embargo, las autoridades dicen que el suicidio e es un problema público ya que cada año unas 36 mil personas se quitan la vida.
Disparadores
Las reuniones familiares, la sobre-comercialización que nos rodea, el comer de más y sentirnos mal, las expectativas desproporcionadas por tener una familia de comercial, un cuerpo perfecto y unas fiestas inolvidables, la fatiga, el estrés asociado a toda la movida navideña, el romper hábitos saludables, hacer balances, el estar lejos de los amigos son cuestiones que movilizan en estos días.
Otras razones
Estados Unidos es un país de inmigrantes, y la distancia geográfica, el vivir lejos de los seres queridos puede provocar tristeza, melancolía o disparar una depresión clínica en las personas que tienen ya una tendencia a estos síntomas. Por otro lado, problemas económicos, laborales y de salud que nos afectan parecen tomar una nueva y más grande dimensión en esta época del año. La psicóloga Michelle Plamondon tiene una serie de tips.
Baja las expectativas
Tus expectativas de las fiestas deben ser reales, la Navidad perfecta que vemos en las promociones o avisos de televisión son irreales. Esto parece una obviedad pero no lo es, ya que los comerciales, las fotos de "familias felices" que muestran en facebook representar una especie de "trampa" en la que pueden caer algunas personas con la autoestima un poco dañada y tendencia a la depresión.
A romper con el desánimo
Si esta época navideña suele ser difícil para ti debes armar tus propios objetivos y no guiarte por los propósitos de los demás o la forma de festejar de los otros. Intenta generar situaciones placenteras para ti, que puedan alcanzar algún objetivo concreto como reconciliarte o reencontrarte con alguien del pasado, mantén un ánimo conciliador en general y sobre todo, concéntrate en hacer algo que te guste.
Elegir, elegir, elegir
Elegir con quien estar, lejos de conflictos, con personas que sabes que te hacen bien, puede hacer la diferencia. Pueden surgir situaciones imponderables que hagan tambalear tu estado anímico, pero hay que aprender a tomarlos con calma y buscar una solución práctica para cada conflicto. Elije también cuánto dinero gastarás, a quiénes les darás regalo y respetar tus tiempos y deseos.
Reconoce tus sentimientos
Si estás triste o deprimido, si alguien cercano ha fallecido recientemente, debes saber que puedes estar mal y de duelo, incluso llorar y expresar tus sentimientos. No puedes forzarte a estar bien todo el tiempo y el duelo es una etapa que lleva su tiempo y debe ser cumplido. Los demás entenderán.
Dar tu tiempo
No te quedes solo en tu casa. Busca algún lugar donde puedes dar una mano, ayudar a tu comunidad. Dar tu tiempo y hacer algún tipo de voluntariado es una forma de sentirte acompañado y a la vez hacer algo por los demás. Verás que cuando das sentirás que recibes mucho más de lo que entregas.
Aceptar las diferencias
En todas las casas y familias hay problemas y diferencias entre sus miembros. Las fiestas no tienen que ser perfectas. Las familias y sus miembros son dinámicas, crecen y se transforman, los hijos crecen y debes aceptar nuevos miembros también. Si tienes conflicto con alguien intenta no sentarte cerca y en su lugar, busca alguien con el que realmente quieres compartir.
Regalos y dinero
Planea con tiempo cuánto vas a gastar y qué regalos comprar. Propone un intercambio de regalos en la familia que sea tipo "amigo invisible", haz una donación de caridad en nombre de otra persona, y si vas de shopping, establece un día en el que vas a comprar lo necesario y sigue tu plan inicial, dicen los expertos.
Aprende a decir que no
No se puede ir a todos los eventos y reunirse con todo el mundo antes de las fiestas para celebrar. Decir que sí cuando en realidad lo que quieres es decir no te puede hacer sentir agobiado y resentido. Tus amigos y colegas deben entender que no puedes hacer todo. También es importante aprender a decir que no a las comidas y bebidas en exceso. Luego terminarás sientiéndote culposo y con indigestión.