A amarse se aprende

Dicen los orientadores y guías espirituales que el gran amor de la vida de uno, es justamente uno mismo. "Amarse a uno mismo es, ante todo, aceptación incondicional y completa de todos nuestros aspectos. Tenemos que empezar amando a nuestro cuerpo tal cual es, sin forzarlo a ajustarse a un modelo que nos han impuesto. Amarlo, cuidarlo y respetarlo por dentro y por fuera", dice Enriqueta Olivari, una escritora argentina que reside en México.

¿Se trata de mimarnos más, de darnos baños de inmersión, masajes en los pies y lucir siempre bien? No, dicen los expertos: Se trata de algo mucho más profundo y trabajoso que implica un trabajo interno. Pero no se trata de algo que viene de afuera sino de un verdadero trabajo y compromiso, que debe practicarse a diario, explica la terapeuta y "coach intuitiva" Banu Sekendur, quien reside en Hawaii.

"Todos nacemos con la capacidad de amar, pero no nos han enseñado a desarrollarla.Nos han inculcado una serie de creencias que nos llevan al dolor, a la dependencia y la carencia afectiva, y por ende a relaciones enfermizas. Por eso es necesario reeducarnos y descubrir nuevas maneras de amarnos y amar a los demás. En realidad es un arte, y como tal hay que aprenderlo y practicarlo a diario", dice Olivari, autora del libro “El amor de tu vida".

Existe la idea de que una persona que llamamos "egoísta" es una persona que se ama demasiado a sí mismo. La experta cree que la persona egoísta lejos de amarse demasiado no se ama, no se acepta, en realidad se odia y se castiga, cree la experta. "No ama a los demás, pero tampoco se ama a sí misma. Pero si uno se ama a sí mismo, dar, ayudar, compartir es algo habitual, algo que fluye sin esfuerzo", agrega.

El amor a sí mismo no es un destino sino una práctica. Tanto Sekendur como la escritora estadounidense Louise Loony Hay, considerada una de las figuras más representativas del movimiento del Nuevo Pensamiento y una precursora de los libros de auto-ayuda han elaborado una serie de estrategias para poner en práctica este aprender a amarse.

Deja de criticarte por todo. La crítica nunca cambia nada. Intenta aceptarte exactamente tal y como eres y apunta al cambio en sentido positivo. Cuando te criticas, tus cambios pueden ser negativos. Cuando te apruebas, tus cambios suelen ser positivos.

Aprende a ser amable contigo y a tener paciencia. Los cambios son graduales. Aprender una nueva forma de pensar y de sentir en relación a ti mismo lleva tiempo. Dejar pasar el tiempo, repetir experiencias positivas, practicar las cosas o acciones que te hacen bien es importante para establecer un cambio duradero.

No dejes que tus pensamientos te llenen de dudas y miedos. Vivir con miedo es algo muy tensionante. Si estás asustado o estresado, utiliza técnicas de control mental y relajación. Por ejemplo, busca una imagen mental que te produzca placer y reemplaza el pensamiento positivo por ella.

Infórmate bien sobre cuál es la nutrición adecuada para ti. ¿Qué clase de alimentos necesita tu cuerpo para obtener la energía y vitalidad óptimas? Infórmate sobre las distintas propiedades de los distintos alimentos, las modalidades de ejercicio físico que existen. Dormir bien también es importante.

Comparte tus cosas con los demás, pero elige personas confidentes, discretas, que sabes que pueden ayudarte en este camino. Busca apoyo y formas de sentirte acompañado por personas que pueden ser inspiradoras de cambio. Recurre a tus amigos y personas de confianza. Los libros de auto-ayuda son muy útiles también.

Tus pensamientos negativos hacia ti mismo pueden cambiar. Debes entender que esos aspectos han sido creados para satisfacer una serie de necesidades y que ahora deberás encontrar nuevas formas nuevas y positivas de satisfacer esas mismas necesidades. De modo que deja que las viejas pautas negativas se vayan.

Mírate a los ojos. Piensa quién eres, cuál es tu historia. Perdona a tus padres por sus errores. Aprende a ver las cosas que te gustan de ti, tus fortalezas y piensa en qué cosas deberías cambiar y te gustaría cambiar. Usa ropa que vaya con tu personalidad, sin importar si están a la moda o no. No debe interesarte impresionar a los demás sino sentirte bien contigo mismo.

Puedes construir la vida que quieres aunque estés solo. Mucha gente permanece esperando a su príncipe azul o a la mujer de sus sueños y postergan sus proyectos en esa espera. Se puede ser feliz y sentirse bien con uno mismo sin estar en pareja, y por el contrario, las personas que están bien suelen ser mucho más atractivas para los demás.

Aunque otros se molesten o eso signifique no ser tan popular, si deseas irte de una fiesta, no ir a algún lado simplemente porque estás cansado, recuerda que tú estás primero, explica Sekendur.

Es importante que te busques tiempo para poder hacer aquellas cosas que te hacen bien, que te dan placer y te gustan. No las tomes como una pérdida de tiempo sino todo lo contrario. No sientas culpa o remordimiento por hacer lo que te gusta y estar bien.

Siempre es bueno revisar los errores pasados para evitar volver a caer en los mismos. Pero no te quedes instalado allí, en la oscuridad, lamentándote por lo que sucedió. Cada cosa que nos pasa es una oportunidad para aprender algo. Los errores sirven para eso pero no para quedarse instalado allí, acumulando resentimiento y buscando culpables.

No tengas miedo de conectarte con aquello que sientes e intuyes que debes hacer. La intuición no es patrimonio de las mujeres. Todos tenemos la capacidad de conectarnos con nuestras emociones y sentimientos. Sigue tus instintos aunque no se interponga con tu ego.

Mantén tu integridad, no caigas en ciertos patrones que después pueden hacerte sentir mal como manipular, mentir u ocultar. Sentirte una persona íntegra y responsable de tus actos te hará estar mucho mejor contigo mismo, y por ende, con los demás.

No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy. Una frase muy escuchada pero muy cierta. No se trata sólo de proponértelo sino de hacerlo. No esperes a sentirte bien para arrancar con los cambios. Empieza hoy mismo con tus proyectos nuevos, que ya con sólo haber empezado y con lograr metas a corto plazo, te sentirás mejor.

Date la oportunidad de soñar grande, sin juzgarte, pensar en la vida que quieres tener, en qué cosas quieres invertir tu energía, cuáles son tus proyectos. Escucha a los demás, aunque sus opiniones puedan dolerte, quizás encuentres algo de verdad en ellas que, si las tomas con seriedad, pueden darte la clave para avanzar y cambiar. Y no temas equivocarte.