Este contenido ha sido archivado y puede no estar actualizado
Ahora sí: salud mental para todos
Por HolaDoctor
-
Enfermedades como cualquier otra
La nueva buena noticia es que el gobierno de Estados Unidos obligará a las empresas aseguradoras a incrementar la cobertura en salud mental y adicciones similar al que ya tienen para tratar y prevenir las enfermedades físicas, señaló la secretaria de salud Kathleen Sebelius.
Si bien la reforma sanitaria impulsada por el presidente Obama, convertida en ley en 2010, establece que la salud mental y los tratamientos para adicción debían estar incluidos en las pólizas de las aseguradoras, la falta de normas específicas les había permitido a las empresas utilizar algunos trucos para negar y limitar esa cobertura.
Según las autoridades de salud, unos 60 millones de personas podrán acceder por primera vez o disfrutar de una mayor cobertura en salud mental gracias a esta medida, que definió como “la mayor expansión en una generación”.
Las aseguradoras tendrán que autorizar sin límite las visitas que un paciente puede hacer a su psicólogo o psiquiatra, del mismo modo que un cirujano o cualquier especialista trata a su paciente hasta darle el alta. Según el Instituto Nacional de Salud Mental, un 26% de la población sufre algún tipo de trastorno mental cada año.
La nueva ley apunta a que las nuevas reglas terminen con la discriminación que tienen algunos pacientes de salud mental con costos más altos que no son cubiertos por los seguros o límites más estrictos en las hospitalizaciones o visitas al médico. “Piensen lo diferentes que podían ser las cosas si todo el mundo sintiera que puede acceder a un tratamiento sin miedo a ser juzgado”, afirmó la secretaria.
Si bien hasta ahora se había intentado la paridad de las enfermedades mentales con las físicas, las trabajas burocráticas y los requisitos de las aseguradoras no lograban esa igualdad. El gobierno había prometido emitir una regla definitiva como parte de un esfuerzo para reducir la violencia armada.
La nueva ley coloca a la salud mental al mismo nivel que cualquier enfermedad, en cuanto a copagos y coberturas. Es decir, según el plan elegido tal será el copago, la cuota y la cobertura, no importa si se trate de un problema físico o mental, las condiciones serán las mismas.
En conferencia de prensa, Sebelius destacó que la nueva ley ayudará a tratar a los niños que tengan problemas de conducta, mejorará la prevención de adicciones y también cubrirá y aumentará los controles periódicos en adultos con problemas mentales y evitará hospitalizaciones innecesarias.
Entre los datos que los funcionarios citan para dar cuenta de la importancia de la nueva ley está el hecho de que en Estados Unidos el número de suicidios duplica al de homicidios. Por otro lado, muchas de las matanzas y tragedias han sido asociadas con personas con trastornos mentales sin tratamiento.
Según calculan los funcionarios, la coberturas de psiquiátricos y tratamiento para combatir adicciones aumentarán un 85% de los casos según la nueva reforma de salud, que tuvo algunos contratiempos al inicio por problemas en el sitio de Internet del mercado de seguros.
Mucho más común de lo que parece
Las enfermedades mentales son mucho más comunes de lo que piensas. Si bien uno de cada cinco estadounidenses sufre algún tipo de enfermedad o trastorno mental, existen tratamientos disponibles hoy al alcance todos.
Si sufres de malestar o algún tipo de trastorno que no te permite dormir bien, comer adecuadamente, cumplir con tus tareas cotidianas, tu humor está notablemente alterado o simplemente estás triste y no sabes qué te sucede, llegó el momento de pedir ayuda.
Las adicciones son de todos
Acorde con las autoridades nacionales, el problema de la drogadicción es un asunto de salud pública y no un tema de la justicia penal. Se calcula que unos 23 millones de estadounidenses sufren de adicción a sustancias y sin embargo sólo uno de cada diez recibe el tratamiento que necesita.
No es un privilegio
El acceso a un tratamiento no debería ser un privilegio para pocos que puedan costearlo. Debe brindarse a todo aquél que lo necesita, aseguran los funcionarios de la salud. Con esta nueva normativa el tratamiento está al alcance de la mayoría.