10 cosas extrañas que pasan a tu cuerpo en el embarazo

Su nombre oficial es linea nigra y es eso: una línea que atraviesa tu barriga de forma vertical. Aparece entre el el cuarto y el quinto mes del embarazo, no se puede prevenir y desaparece después del parto. Si eres de piel morena o aceitunada, es más probable que la línea se manifieste.

Hormonas, ellas son las responsables de que tu cabello luzca tan abundante y brillante que no necesitarás del secador o la plancha. El estrógeno estimula su crecimiento y puede ser tan poderoso que es posible que notes más vellos en brazos y piernas. El efecto pasará después de que nazca el bebé.

Se llaman estrías y es muy probable que aparezcan en tu abdomen, muslos o senos al estirarse tu piel. Una loción con vitamina E puede ayudar a prevenir estas líneas rosadas o marrones. La mala noticia es que hay un componente genético: si tu madre las tuvo, es muy probable que tú las tengas.

Se llama melasma y son manchas oscuras que aparecen en el rostro. También se conoce como “máscara del embarazo” por la forma que toma (salen en la frente y la mejillas). Este aumento de la pigmentación también es responsabilidad de las hormonas y, en la mayoría de los casos, desaparece después de nacer el bebé. Mientras, usa un buen protector solar (FPS +15).

Tu barriga crece, tu piel se estira, tiende a resecarse y ¡pica! La sensación puede ser realmente incómoda y se puede extender a brazos, piernas y palmas de las manos. Evita duchas calientes y usa jabones y cremas suaves. Un baño de avena puede aliviar.

El volumen de la sangre aumenta y se almacena en las venas, que han incrementado su tamaño. La venas varicosas pueden ser abultadas de color púrpura o azul y se acumulan en las piernas y en la vagina. Para mejorar tu circulación, evita estar de pie o sentada mucho tiempo, usa ropa suelta y medias para várices y eleva tus tus pies cuando te sientes.

Si creías que tu acné juvenil era cosa del pasado, te sorprenderás al ver que las fastidiosas espinillas vuelven. El exceso de hormonas hace que tus glándulas sebáceas produzcan más grasa y aparezca la erupción. Mantén tu rostro limpio e hidratado con productos suaves (nada de tretinoína ni Retin-A). Pronto todo pasará.

Así como suena: se trata de una coloración azul oscuro o violáceo en la vagina, la vulva y el cuello uterino. Se llama signo de Chadwick y puede aparecer entre las seis y ocho semanas del embarazo. También tiene que ver con la presión del bebé y luego desaparece.

El arco del pie se relaja por efecto de la relaxina (sí, otra hormona) y, junto al aumento del peso corporal, hace que el pie se ensanche, se aplane y se haga más largo. La retención de líquidos también influye. El pie puede aumentar uno o dos números más y es probable que no vuelva a su tamaño anterior.

Gases que escapan de tu cuerpo de distintas maneras y que hacen sonar tu barriga, eso es la flatulencia durante el embarazo. La acumulación de gases es causa del aumento de los niveles de progesterona, hormona que hace que los músculos del cuerpo se relajen, incluído el esfínter esofágico inferior. Esto se traduce en acidez estomacal, digestión lenta y muchos y eructos.

Además de estas diez alteraciones pueden ocurrir muchas más, como tener hemorroides o demasiado flujo vaginal. Como verás, casi todas desaparecen al nacer tu bebé, solo debes tener un poco de paciencia y consultar a tu médico cada vez que tengas dudas.