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Riesgos del ayuno como práctica religiosa
Por ggarcia@holadoctor.net
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Ramadán, una celebración musulmana
Una vez al año, de junio a julio, se conmemora el Ramadán, una celebración religiosa musulmana que simboliza un acto de sumisión a Alá. La misma dura un mes, durante el cual se hace ayuno de comidas y bebidas mientras está la luz del día y se practica la humildad y la castidad.
Ayuno obligatorio
El ayuno en esos días es obligatorio, salvo en enfermos, embarazadas, adultos mayores, madres que están amamantando y niños. Quien se enferma durante el período de ayuno tiene permitido abandonar la práctica hasta que se recupere.
Ensayos previos
El doctor Williams Balogun, del Hospital Universitario Ibadan, de Oyo State, en Nigeria explica que hay un período - pre Ramadán - donde la persona se prepara y observa el impacto del ayuno en su salud. Si no logra controlar su diabetes, por ejemplo, debe evaluar los riesgos de ayunar.
La religión católica sugiere el ayuno a sus fieles en los días “penitenciales”, que son los viernes de todo el año y también durante la Cuaresma, período de 40 días que va desde el Miércoles de Ceniza hasta el Jueves Santo. En algunos casos solo se cambian los hábitos alimentarios, sustituyendo la carne por pescado y otros alimentos.
En las prácticas primitivas de ayuno cristiano no se hacía referencia al pescado, por eso se pensó que no entraba dentro de los alimentos “prohibidos” durante la Cuaresma. Esta costumbre perdura hasta hoy y soluciona los problemas a la hora de armar un menú con un contenido nutricional que no reste energía al organismo.
Las nuevas tendencias cristianas de la filosofía del ayuno penitencial proponen una alimentación responsable y solidaria. Para la Iglesia, ya no se trata de no comer ciertos alimentos o abstenerse de otros, sino de darle un sentido social al ayuno, para acercarse más a Dios y practicar la humildad y la moderación.
Ayuno y judaísmo
El sàbado 4 de octubre se celebra Yom Kipur o Día del Perdón, donde la religión judía practica ayuno para mostrar el dolor y elevar el espíritu. Durante esta privación de alimentos se repasan lecturas que recuerdan los sucesos amargos y tristes de la vida del pueblo, para poder comprenderlos mejor y esforzarse en no repetir los errores de los antepasados.
Varios días de ayuno
Esta religión practica varios ayunos al año: para recordar la destrucción del Templo de Jerusalén, el ayuno de los Primogénitos un día antes de Pesaj o Pascua y el de Esther, antes de la Fiesta de Purim. El más importante es el de Yom Kipur o Día del Perdón, que está comandado directamente por Dios.
La vida ante todo
Preservar la vida es un valor supremo en el judaísmo por eso hay que evaluar si el ayuno puede poner en riesgo la salud. Los diabéticos, los que deben comer o beber porque están tomando alguna medicación, o quienes por su condición médica necesitan comer durante el día deben consultar a su rabino qué conviene hacer.
Momentos previos
Antes del ayuno los practicantes consumen muchos carbohidratos, y algunas familias hacen una comida previa a Yom Kipur que incluye carne, pollo o pescado con pasta, arroz, cuscús, patatas legumbres y granos. No se recomienda incluir sal ni especias pesadas que puedan aumentar la sed, ni bebida diuréticas como té y café.
Ayuno y diabetes
Una práctica espiritual basada en el ayuno prolongado puede ser perjudicial para los diabéticos y enfermos de cáncer. Si bien están exentos de practicar ayuno, algunos se arriesgan de todos modos, aún cuando deban interrumpir la medicación y suspender citas médicas y visitas al hospital.
El ayuno afecta la salud del diabético por el riesgo de aumento del nivel de azúcar en la sangre. Esto puede incidier en la concentración, provocar mareos, irritabilidad, coma y hasta la muerte. Y cuando llega el momento de comer, atiborrarse de comida puede aumentar en exceso el azúcar en la sangre.
Al romper el ayuno es importante, sobre todo en los diabéticos, no excederse con alimentos altos en grasa o carbs. Y antes de empezar debe controlar su medicación para ver si ésta ayuda a mantener un correcto nivel de azúcar en la sangre, para evitar ansiedad, irritabilidad, baja concentración, visión borrosay otras irregularidades.
El deporte y la fe
Los deportistas profesionales tienen que enfrentar la disyuntiva de elegir entre la fe y los compromisos con su club. Así ocurrió en el mundial de fútbol de Brasil con las selecciones de Bosnia e Irán y otros equipos que contaban con jugadores de religión musulmana. Para ellos se cambió el menú de comidas.
Estoy trabajando
Emma Gardner, nutricionista del Instituto Inglés de Deportes, explicó a Reuters que el desafío es mantener la hidratación y los niveles de energía de los jugadores. Algunos, como el alemán Mesut Ozil, del Arsenal inglés, decidió no participar en el Ramadán “por estar trabajando”.
Cambio de actitud
Otros en cambio, como la Hamilton Muslim Basketball Association participaron a fin de junio fr 2014 en un importante torneo en medio de Ramadán. Los deportistas jugaron 7 partidos en un solo día, durante el cual no bebieron ni una sola gota de agua. “Romper el ayuno no era opción, es algo entre ti y Dios”, expresó el presidente de la liga Brian Beauvais.
Motivos espirituales
En definitiva, el ayuno se hace para demostrar a Dios que se toma en serio la relación con él, y se lo materializa absteniéndose de comer por un tiempo determinado. La idea no es castigar al cuerpo sino enfocarse más en la espiritualidad, apartando los ojos de la cosas materiales de este mundo.