La cama es uno de los lugares preferidos de muchas personas y al mismo tiempo de muchos microbios. Aunque a simple vista no se ven, existen bacterias, hongos, piel muerta y hasta materia fecal conviviendo contigo cada noche. De ahí la cuestión que titula este artículo.
Aunque esta pregunta gira en la cabeza de muchas amas de casa desde hace varias generaciones, la verdad es que la mayoría ignora la respuesta correcta. Para comprobar esto la revista Women’s Health se dio a la tarea de lanzar la misma duda a 1,187 lectoras.
De todas las entrevistadas, el 44% dijo lavar sábanas una vez a la semana, un 31% comentó hacerlo dos veces al mes y un 16% admitió no hacerlo casi nunca. Estos resultados seguramente pusieron a temblar a muchos bacteriólogos e inmunólogos.
Cuando tu cuerpo entra a tu cama, la piel deja millones de células muertas, las cuales previamente tuvieron contacto con residuos del entorno, como pueden ser maquillaje, sudor, pelo de animal, polvo, etc. Es decir, todo lo que te rodea estaría en tu cama.
Cuidado con los ácaros
Además, existen insectos muy pequeños, como los ácaros que suelen hacer de tu cama su hogar ideal para vivir y multiplicarse. Según una investigación de la Universidad de Kingston, en Inglaterra, una cama promedio alberga hasta 1.5 millones de ellos.
¿Qué tienen de malo?
Si lo anterior no te sorprendió, entonces deberás saber que los ácaros son los responsables de algunas alergias como taponamiento nasal, secreción, estornudos y picor (rinitis) así como de problemas más serios como asma. (Clínica Mayo).
Materia fecal
Aunado a los ácaros, también es posible encontrar en la cama fluidos corporales o materia fecal, que pueden salir del cuerpo al ser rozados con las cobijas o sábanas. Esto por igual se traduce en bacterias que pueden producir infecciones.
Ante esto, la Clínica Mayo recomienda lavar todas las sábanas, fundas de almohada y de colchón cada semana”. Para mejores resultados hazlo con agua caliente al menos a 60 grados centígrados con la intención de eliminar ácaros y alérgenos.
Otra opción
En el caso de las prendas que por su composición no deben lavarse con agua caliente, puedes emplear la secadora 15 minutos a una temperatura de 60 grados centígrados, para después lavar y secar normalmente. Otra opción es congelar la prenda para matar ácaros.
Es importante tratar de mantener la humedad de la casa por debajo del 50%, pues los ácaros suelen reproducirse fácilmente en este tipo de ambientes. Para ello usa un deshumidificador, aire acondicionado, así como un higrómetro para medir dichos niveles.
¿Qué hay de la ropa?
Al igual que las sábanas, la ropa para dormir también alberga miles de bacterias, las cuales constituyen un riesgo serio ya que pueden transferirse a otras prendas o causar infecciones corporales, explica la profesora Rally Bloomfield, de la Escuela de Medicina e higiene de Londres.
A pesar del peligro que esto representa, muchas personas no toman en serio la medida de lavar la ropa para dormir. De acuerdo con un estudio hecho por la escuela donde trabaja Bloomfield, los hombres lo hacen cada dos semanas, mientras que las mujeres, cada 17 días.
¡Cuidado!
Es por esto que la Clínica Mayo aconseja no usar aquellas prendas que atrapen con facilidad el polvo. En su lugar mejor usar telas de materiales ligeros que además sean fáciles de lavar.
¿Y si el perro duerme en cama?
Algunas familias tienden a tratar a la mascota como un hijo más de la familia por lo que le permiten entrar a la cama e incluso descansar en ella. Aunque este gesto es sinónimo de amor y cariño hay que saber que no deja de ser insalubre. Así que, “adiós de la cama, Fifi”.
Bye, peluches
Por consiguiente también se sugiere quitar la alfombra del dormitorio, así como los peluches, ya que son un buen refugio de ácaros y otras bacterias. Puedes pasar la aspiradora para reducir el polvo y el riesgo de adoptar gérmenes.
Irse a la cama limpio es sinónimo de una buena higiene en la cama. Y es que, el sudor suele funcionar como un imán de los ácaros, por lo que tomarse una ducha antes de descansar tampoco no le vendría nada mal a nadie.