Nuevos estudios realizados en la pequeña que ahora tiene 4 años mostraron reservorios del virus del sida en su organismo, es decir que éste sigue presente en su torrente sanguíneo a pesar de permanecer indetectable durante años.
Apenas en marzo, los doctores habían dicho que parecía estar libre de VIH, aunque ya hacía dos años que no recibía medicación. Pero estudios cuyos resultados se dieron a conocer el jueves 10 de julio mostraron que su infección ya no está en remisión. "Ella está recibiendo de nuevo cócteles de drogas para tratar el virus y está respondiendo bien", dijeron los doctores.
El doctor Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, dijo que la noticia "desilusiona" y que podría tener impacto en investigaciones federales que están enfocadas en demostrar lo importante de comenzar tratamientos agresivos de manera temprana.
La llamada transmisión vertical, de madre a niño, está controlada en el país, gracias a que las embarazadas seropositivas toman medicación durante los meses de gestación y durante el parto.
En el caso de la mamá de la pequeña, no había recibido cuidado prenatal y se descubrió que era portadora del virus del sida durante el parto. Por el enorme riesgo de contagio, los médicos iniciaron un agresivo tratamiento con la pequeña, apenas a 30 horas de nacida. Incluso antes de que se recibieran los tests que confirmaran que era seropositiva.
La niña recibió tratamiento hasta los 18 meses. Y mantuvo su carga viral —la cantidad de virus en sangre— indetectable, hasta ahora.
Sólo una persona en la historia de esta epidemia se considera curada. Se trata de un hombre de San Francisco que recibió un transplante de médula ósea en el 2007 en Alemania —por eso es conocido como el paciente de Berlín— de un donante con resistencia natural al VIH. Ya lleva 5 años sin presentar signos de infección.