Tal vez ser neurótico no sea tan malo después de todo, pues los científicos han descubierto que este rasgo del carácter puede ser bueno para la salud.
Los investigadores hicieron este asombroso descubrimiento mientras realizaban un estudio sobre cómo los rasgos de personalidad pueden influir en la biología y predecir ciertas condiciones nocivas de la salud.
Puntos clave
El comportamiento neurótico suele estar marcado por el mal humor, un constante estado nervioso y a veces de angustia. Y se ha vinculado con la hostilidad, depresión, consumo excesivo de alcohol y tabaquismo.
Pero ahora, han encontrado el lado bueno de este rasgo. Los investigadores creían que los neuróticos mostrarían una mayor propensión a las enfermedades crónicas, y por el contrario, se sorprendieron al encontrar que mostraron los niveles más bajos.
El líder del estudio, Dr. Nicholas Turiano, de la Universidad Medical Center de Rochester, dijo que los resultados sugieren que hay un gran número de personas neuróticas y meticulosas: “estas personas tienden a sopesar las consecuencias de sus acciones, y por lo tanto, su nivel de neurosis, junto con sus escrúpulos, probablemente les impiden involucrarse en comportamientos riesgosos”, declaró.
Para el estudio, el Dr. Turiano y sus colegas rescataron parte de la Encuesta Nacional de mediana edad, desarrollado en EEUU (MIDUS) y sobre esa base de datos, tomaron un muestreo de mil adultos.
Luego, esos participantes se sometieron a una evaluación completa de la salud, incluidas las pruebas de biomarcadores como “Interleukin 6”, una proteína que se relaciona con enfermedades del corazón, derrame cerebral, asma, artritis, diabetes y algunos tipos de cáncer.
Como resultado, los investigadores encontraron que 441 individuos presentaron altos puntajes de neurosis y, a su vez, eran muy meticulosos. Y descubrieron que cuanto mayores son estos dos rasgos de la personalidad, más bajo es el nivel de la proteína "protectora". Este grupo también tuvo un menor índice de masa corporal y menos condiciones de salud crónica diagnosticadas.
"La especulación es que los neuróticos saludables pueden ser hiper-vigilantes de su estilo de vida y buscan tratamiento cuando surge un problema", dijo el Dr. Turiano.
El líder del estudio señaló que se necesita ampliar la investigación para extraer más conclusiones firmes. "En estudios futuros, se debe tratar de averiguar quiénes son los neuróticos saludables y por qué son más sanos", declaró Turiano.
Con una fuerte dosis autobiográfica, Woody Allen se ha convertido en un ejemplo de rigor para entender lo que es la neurosis, a través de la elaboración de una imagen del "neurótico pintoresco" que siempre logró llamar la atención.
En “Annie Hall”, “Manhattan” y hasta en “Medianoche en París” los personajes neuróticos son centrales. Pero sobre todo en las dos primeras, se puede observar a neuróticos extravagantes, inseguros, deprimidos, paranoicos, comediantes hipocondríacos, escritores (¿tanto como el propio Allen?) y propensos a la morbilidad y la torpeza social.
Woody Allen, quien ha vivido y entendido la neurosis como nadie, ha fusionado "neurosis" con "excentricidad", quitándole un poco de peso real a la palabra.
Según la Organización Mundial de la Salud, la neurosis es un trastorno psíquico sin una alteración orgánica demostrable, en la cual el juicio de la realidad se conserva y hay lucidez.
El neurotismo saludable fue acuñado en el año 2000, cuando otros investigadores describieron por primera vez cómo la meticulosidad puede proporcionar la dosis de autodisciplina que reduce comportamientos malsanos como comer en exceso, fumar y beber alcohol.