Una úlcera péptica es una llaga en la mucosa que recubre el estómago o el duodeno, que es la primera parte del intestino delgado.
La infección por Helicobacter pylori es una de las causas más comunes de úlcera péptica. Los investigadores todavía están estudiando cómo las personas se infectan con esta bacteria, que puede transmitirse de persona a persona a través del contacto con el vómito, las heces o la saliva de una persona infectada, o por alimentos contaminados.
Puntos clave
- Una úlcera péptica es una llaga en la mucosa que recubre el estómago o el duodeno.
- Causa un fuerte ardor o dolor en el estómago.
- Debe tratarse para evitar complicaciones.
SINTOMAS
El ardor o dolor en el estómago es el síntoma más común de esta úlcera. Para algunas personas, el dolor puede ocurrir cuando el estómago está vacío o por la noche, y puede desaparecer por un corto tiempo después de comer. Para otras, comer puede empeorar el dolor.
Muchas personas que tienen úlceras pépticas no presentan ningún síntoma. Es posible que no los desarrollen hasta que una úlcera provoque complicaciones.
El dolor puede:
- Aparecer entre comidas o durante la noche
- Desaparecer después de comer algo o de tomar un antiácido
- Durar minutos o hasta horas
- Desaparecer y reaparecer por varios días o semanas
CAUSAS
Las úlceras pépticas ocurren cuando los ácidos que ayudan a digerir los alimentos dañan las paredes del estómago o del duodeno.
Puede causarlas el uso prolongado de antiinflamatorios no esteroides, como la aspirina y el ibuprofeno.
Entre las causas menos comunes pero a considerar están:
- Infecciones causadas por ciertos virus, hongos o bacterias distintas de H. pylori
- Cirugías o procedimientos médicos que afectan el estómago o el duodeno.
- Ciertas enfermedades y condiciones de salud, como la enfermedad de Crohn.
- Lesiones, bloqueos o falta de flujo sanguíneo que afecta el estómago o el duodeno.
- Enfermedades crónicas graves, como la cirrosis o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC)
- Síndrome de Zollinger-Ellison, una afección que se produce cuando uno o más tumores (llamados gastrinomas) hacen que el estómago produzca demasiado ácido.
DIAGNÓSTICO
Para detectar una infección por Helicobacter pylori, el doctor realizará exámenes de sangre, de aliento o fecales. También podrá examinar el estómago y el duodeno por dentro haciendo una endoscopía o rayos X.
TRATAMIENTO
Las úlceras pépticas empeorarán si no se tratan.
El tratamiento puede incluir medicinas para reducir los ácidos del estómago o antibióticos para matar a Helicobacter pylori. Los antiácidos o la leche no curan las úlceras aunque pueden aliviarlas temporalmente.
PREVENCIÓN
Lo mejor es evitar la aspirina, el ibuprofeno, el naproxeno y otros medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE). El acetaminofeno puede ser la alternativa.
Si por alguna razón médica se deben tomar AINE, conviene hablar primero con el proveedor de salud, que puede:
- Hacer una prueba de detección de H pylori antes de tomar estos medicamentos.
- Recetarle un bloqueador de ácido H2
- Recetar un medicamento llamado misoprostol
Los siguientes cambios en el estilo de vida pueden ayudar a prevenir las úlceras pépticas:
- No fumar ni masticar tabaco
- Evitar el alcohol
El estrés y las comidas picantes no causan úlceras, pero pueden empeorarlas, por el consejo es manejar el primero y evitar o reducir el consumo del segundo.
COMPLICACIONES
Si no se tratan, las úlceras pépticas pueden provocar:
Hemorragia interna. El sangrado puede ocurrir como una pérdida lenta de sangre que provoca anemia o como una pérdida grave de sangre que puede requerir hospitalización o una transfusión de sangre. La pérdida grave de sangre puede provocar vómitos negros o con sangre, o heces negras o con sangre.
Una perforación en la pared del estómago. Las úlceras pépticas pueden perforar la pared del estómago o del intestino delgado, lo que lo pone en riesgo de sufrir una infección grave de la cavidad abdominal (peritonitis).
Obstrucción. Las úlceras pépticas pueden bloquear el paso de los alimentos a través del tracto digestivo.
Cáncer gástrico. Los estudios han demostrado que las personas infectadas con H. pylori tienen un mayor riesgo de cáncer gástrico.
Fuentes: Instituto Nacional de la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y Renales de Estados Unidos, Biblioteca Nacional de Medicina, Penn Medicine, Mayo Clinic.