¿Qué es la mutilación genital femenina?
Cuando se habla de mutilación genital femenina se refiere a procedimientos no médicos que alteran los órganos genitales femeninos y, además de ser extremadamente crueles y dolorosos, suelen provocar sangrados, problemas al orinar, dolor al tener sexo, infecciones e infertilidad.
La mutilación genital femenina (MGF) no aporta ningún beneficio a la salud de las mujeres y niñas, también puede producir hemorragias graves y problemas urinarios, y más tarde pueden causar quistes, complicaciones del parto y aumento del riesgo de muerte del recién nacido.
Nada menos que unos 140 millones de mujeres y niñas sufren en la actualidad las consecuencias de la MGF, según datos de la Organización Mundial de la Salud y unas 30 millones de niñas o en adolescentes de hasta 15 años están en riesgo de sufrir una mutilación genital en los próximo diez años.
La MGF, una práctica común en Somalia, Guinea, Djibouty y Egipto, constituye una violación de los derechos humanos de las mujeres y niñas.
Cuatro clases de mutilación
La mutilación genital femenina puede darse en cuatro tipos de procedimientos: La clitoridectomía: que es la extracción parcial o total del clítoris, la excisión, que es la extracción parcial o total del clítoris y los labios menores, con o sin excisión de los labios mayores, la infibulación: que consiste en el estrechamiento de la abertura vaginal para crear un sello mediante el corte y la recolocación de los labios menores o mayores, con o sin resección del clítoris.
También se considera mutilación a todos los demás procedimientos que lastiman a los genitales externos con fines no médicos, tales como la perforación, incisión, raspado o cauterización de la zona genital.
Mezcla de factores
Al referirse a la mutilación genital femenina, la OMS habla de multiplicidad de factores, entre los que se encuentran los culturales, religiosos y sociales existentes familiares y comunitarios.
Muchas veces se considera a la MGF como parte de la crianza de una niña y una forma de preparación para la vida cultural y el matrimonio, ya que se la relaciona con la fidelidad y la falta de relaciones prematrimoniales. Quienes la llevan a cabo suelen referirse a razones religiosas.
Con la esperanza de ser operadas y dejar de sentir dolor, muchas mujeres mutiladas viajan a rumbo al llamado "Hospital del placer". Sin embargo, aunque está terminado y construido, las autoridades no han permitido su apertura. Algunos dicen que es la iglesia católica de Burkina Faso la culpable de que no se haya inaugurado.
En el 2008, la Asamblea Mundial de la Salud aprobó una resolución (WHA61.16) para la eliminación de la MGF, en la que se subrayaba la necesidad de una acción conjunta entre todos los sectores - salud, educación, finanzas, justicia y asuntos de la mujer.
Mientras tanto, millones de mujeres sueñan con una cirugía simple y de unos 45 minutos de duración, que pueda devolverles el placer al tener sexo, según indican los médicos especializados.