No importa si eres la imagen de la salud o sufres de múltiples condiciones médicas, deberías tener un proveedor de atención primaria (PCP). Es la persona que maneja tus problemas de salud rutinarios como esguinces o la influenza, que lleva el registro de tus medicamentos y si es necesario, coordina tu atención con especialistas. Sin esa persona clave, eres más propenso a cometer errores en tus medicamentos y a que los síntomas tempranos pasen desapercibidos hasta que se haya desarrollado un problema grave.
Un médico capacitado en medicina interna, generalmente llamado internista, frecuentemente juega el papel de proveedor de atención primaria. (Los médicos [M.D.] y médicos osteópatas [D.O.] pueden ser internistas).
Pero los proveedores con otra capacitación también pueden ser una buena opción. Aquí está la guía de esos proveedores, y cuándo pueden tener sentido para ti.
Familias con hijos
Si quieres un médico para toda la familia, considera a un médico de medicina familiar certificado por la junta, un médico similar a un internista pero capacitado para tratar a los niños. De esa forma, no necesitarás a un pediatra, los registros médicos familiares se quedarán en una sola oficina, y construirás relaciones con un médico familiar para toda la familia.
Mujeres
Puedes considerar tener a un médico obstetra/ginecólogo [OB/GYN] como proveedor de atención primaria. Los obstetras y ginecólogos brindan la atención que las mujeres necesitan, como exámenes de los senos, control de la natalidad, y pruebas de detección de cáncer cervical. O considera a una partera certificada [C.N.M.], una enfermera de práctica avanzada con capacitación especial en atención para la mujer.
Pero algunos estudios sugieren que es posible que los OB/GYN les hagan menos pruebas a sus pacientes para detectar si hay problemas de colesterol, diabetes, cáncer colorrectal o les brinden consejería sobre dieta y ejercicios.
Entonces, si estás considerando a uno de ellos o a una partera certificada como tu proveedor de atención primaria, pregúntales si se sienten cómodos con ese papel.
Personas mayores de 65 años
Los geriatras son internistas o profesionales de medicina familiar con capacitación especial en problemas de salud de personas mayores.
Aunque son pocos, son muy útiles para atender a personas frágiles o con discapacidades cognitivas cuyas familias y amigos se sienten agobiados por los complicados planes de tratamiento y múltiples proveedores de atención médica, dice la doctora Annette Medica-Walpole, jefe de Geriatría y Envejecimiento del Centro Médico de la Universidad de Rochester.
Las investigaciones sugieren que las personas que ven a los geriatras son menos propensas a terminar en un hospital, posiblemente porque es más probable que estos médicos detecten las señales de advertencia de demencia y eviten medicamentos que conlleven riesgos. Puedes buscar a un geriatra en tu área ingresando a healthinaging.org.
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