A Yuan le gustan tanto las mujeres como correr riesgos ¡ya que llegó a tener 17 novias en forma simultánea! Pero el 24 de marzo, este chino de la provincia de Hunan tuvo un accidente automovilístico y tuvo que ser hospitalizado. Cuando los médicos trataron de contactar a alguien cercano ¡todas sus mujeres se presentaron en el centro médico!
Sorprendidas, empezaron a conversar y descubrieron que el Casanova no solo las había engañado sino que también les debía alrededor de 500.000 yuanes (más de $ 82,000 dólares). Las novias estafadas, de edades comprendidas entre los 21 y los 40 años, revelaron a la prensa que algunas llevaban una relación de 3 meses, y otra llevaba 9 años con él. Una tercera era la madre de su hijo y una cuarta lo consideraba el hombre perfecto y hasta estaba planificando su boda.
Una de las novias despechadas, Xiao Li, declaró al diario South China Morning Post que estuvo un año y medio con él, y cuando se enteró del accidente no podía parar de llorar. Pero las lágrimas se le secaron cuando vio que cada vez llegaban tantas mujeres a visitarlo al hospital.
Yuan está acusado de robarle $40,000 dólares a su ex esposa y se le inició una causa por fraude. Para empeorar el panorama, tambien se descubrió que falsifico un titulo de ingeniero civil para conseguir un trabajo.
Una vez recuperado de las lesiones, Yuan abandonó el hospital de madrugada con escolta policial, y regresó a la casa de su madre en su ciudad natal de Fulin. Pero antes tuvo un gesto de romanticismo, el Casanova de Oriente abrazó a cada una de las mujeres y les pidió "No me culpen. Todas ustedes son mis esposas."
¿Qué es el complejo de Casanova?
El término se aplica a los hombres mujeriegos y toma su nombre de Jacques Casanova de Seingalt, quien en el siglo XVIII hizo de la seducción una forma de vida. Se le atribuyeron 122 mujeres en 39 años, y sus gustos eran variados ya que las elegía de toda edad y posición social.
Para un Casanova, eterno mujeriego, insaciable e irresistible, el sexo no tiene nada que ver con el amor, sino que es un medio que lo ayuda a sentirse aceptado. Por un lado considera a las mujeres objetos deseables o trofeos adquiridos gracias a sus habilidades. Por el otro, cada una de estas conquistas le permite sentirse seguro y eleva su autoestima.
En un artículo de Psychology Today, la escritora Adelle Waldman explica que estos personajes buscan tener sexo con la mayor cantidad posible de mujeres. Y lo logran con facilidad ya que son encantadores, conocen al dedillo las emociones femeninas y saben perfectamente que botones tocar para hacerlas sentir atractivas y halagadas.
Jed Diamond, psicoterapeuta y autor de "El macho irritable", explica que los seductores seriales suelen tener una historia familiar caracterizada por la ausencia de un padre. Una falta temprana de conexión con la figura masculina les provoca inseguridad respecto de su capacidad de ser aceptados, y buscan aceptación seduciendo mujeres.
Diamond sostiene que la causa del deseo del Casanova por seducir la mayor cantidad de mujeres posible es la baja autoestima. Y aunque parezca que estos individuos disfrutan de esta forma de vida, muchas veces solo le ponen en evidencia su inseguridad. ¿Podrán ser aceptados y amados por la próxima conquista? Nunca lo sabe, y como un cazador, vuelve a salir en busca de su presa, que sin embargo nunca alcanzará a llenar el vacío que lo agobia.
Casanovas informáticos
Una investigación de la Facultad de Psicología y el Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) demostró que ser infiel se debe tanto a factores genéticos, como biológicos, químicos, psicológicos, ambientales, sociales y culturales.
Hay otro factor que favorece la infidelidad, y si bien esto no le ocurrió al Casanova original, sì mete la cola entre los donjuanes modernos: la Internet. Según Yannick Chatelain, especialista en nuevas tecnologías, la Internet es la forma más frecuente de infidelidad conyugal, “Cualquiera puede ver que la computadora ha perturbado las relaciones de la familia”, comentó.
De todos modos, no se puede decir que todo está perdido. Cuando una relación amorosa se desmorona a causa de una infidelidad, conviene buscar ayuda profesional de inmediato. La psicóloga Georgina de Palmeri aclara que la pareja, por su parte, debe de cumplir con tres puntos: reconocer el hecho, tener la decisión de perdonarse y trabajar en conjunto para salvar la relación,