La circuncisión es un procedimiento que se realiza desde la prehistoria, en muchas ocasiones por cuestiones religiosas o culturales.
Por lo general se lleva a cabo durante los primeros días de vida o antes de la pubertad, pero muchos adultos optan por este procedimiento por cuestiones estéticas.
La circuncisión consiste en remover el prepucio, que es la capa de piel que cubre el glande, la parte final del pene. En el mundo, cerca del 39% de los hombres están circuncidados.
El 70% de las circuncisiones que se realizan en el mundo son por cuestiones religiosas.
Estados Unidos es el país donde más se realizan circuncisiones por cuestiones no religiosas, esto se debe a que en el siglo XIX se hicieron campañas promoviendo este procedimiento para mantener una higiene adecuada y prevenir la masturbación.
Hoy en día sabemos que la circuncisión no es necesaria para mantener una buena higiene y que la masturbación puede disminuir el riesgo de padecer cáncer de próstata. Entonces, ¿por qué se sigue realizando?
La fimosis es una condición en la que el prepucio no puede retraerse por completo debido a que está muy cerrado. Esta condición impide una adecuada higiene y la acumulación de esmegma, una secreción normal que si no se limpia puede promover infecciones y se ha llegado a asociar con cáncer
Cuando hay fimosis y llega a retraerse el prepucio detrás del glande puede quedarse atorada, causando una parafimosis. En estos casos la circulación a la punta del pene disminuye y requiere de tratamiento urgente.
El frenillo es una parte del prepucio que se conecta con el pene, cuando es corto puede causar dolor al mantener relaciones sexuales.
La circunsición puede ser un tratamiento para los pacientes con fimosis o frenillo corto. Otra razón para realizarla es que se ha visto que la circuncisión puede disminuir el riesgo de contraer algunas infecciones de transmisión sexual, sin embargo, no sustituye el uso del condón.
La circuncisión es por lo general un procedimiento seguro, pero que no está exento de complicaciones como sangrado, infección o que se abra la herida. Por este motivo se sugiere que se realice sólo en aquellos pacientes que de verdad lo requieran.