Sabemos que el chupón se ha ganado mala fama, y con razón: puede afectar la lactancia materna y también la formación de la dentadura, sin embargo, aún hay muchos padres que deciden usarlo porque da tranquilidad a sus pequeños. Para ellos, tenemos buenas noticias: una nueva investigación sugiere que el temido chupete puede prevenir alergias en los bebés, todo depende de cómo lo limpien.
Hay papás que se meten a su propia boca los chupetes de sus hijos, los chupan para “limpiarlos” y luego se lo dan de nuevo al bebé. Sí, la idea puede resultar desagradable y anti higiénica, pero al hacer esto es como se logra una menor respuesta alérgica entre los niños pequeños, de acuerdo a la investigación llevada a cabo por Henry Ford Health System en Detroit.
"Entrevistamos a 128 madres de bebés varias veces durante un período de 18 meses y les preguntamos cómo limpiaron el chupete de su hijo", dice la alergista Eliane Abou-Jaoude, quien es miembro del Colegio Americano de Alergia, Asma e Inmunología (ACAAI, por su sigla en inglés) y autora principal del estudio. Los resultados mostraron que los bebés de las madres que chuparon el chupón tenían niveles más bajos de IgE, un tipo de anticuerpo relacionado con las respuestas alérgicas en el cuerpo.
El 58% de los niños de las 128 madres usaba chupón. Mientras que casi la mitad de las mamás de este grupo dijeron que esterilizaban el chupete para limpiarlo, el 12% admitió que ellas o sus parejas lo chupaban y luego lo metían de nuevo en la boca de su bebé.
El alergista Edward Zoratti, coautor del estudio y miembro de ACAAI, explicó que la succión del chupete de los padres estaba vinculada a niveles de IgE suprimidos, a partir de los 10 meses de edad y se mantuvo durante 18 meses. Agreagó que "ee necesita más investigación, pero creemos que el efecto puede deberse a la transferencia de microbios que promueven la salud de la boca de los padres. No está claro si la menor producción de IgE observada entre estos niños continúa en los últimos años".
Partiendo de que la exposición a ciertos microorganismos en las primeras etapas de la vida estimula el desarrollo del sistema inmunológico y puede proteger contra enfermedades alérgicas más adelante, se podrían comprender mejor estos hallazgos. Según la investigadora principal, la succión del chupete de los padres puede ser un buen ejemplo de cómo los padres pueden transferir microorganismos sanos a sus hijos pequeños.
Esta no es la primera investigación que muestra beneficios del chupón en la salud de los bebés. Un estudio llevad a cabo en 2011 mostró que usarlo a la hora de dormir redujo las muertes por Síndrome de muerte súbita del lactante en 61%. Desde entonces, la Academia Americana de Pediatría (AAP, por su sigla en inglés recomienda su uso como forma de prevención.
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