Un informe de 2013 de la Universidad de Harvard señala que las bebidas azucaradas provocan al menos 180,000 muertes al año a nivel mundial, y en EE.UU., alrededor de 25,000. De esas muertes -vinculadas a las bebidas azucaradas gaseosas, deportivas y jugos- 132,000 fueron por diabetes, 44,000 por enfermedades cardiovasculares y 6,000 por cáncer.
Todos estos males ya son de dominio público, pero ahora los científicos de la Escuela de medicina de Harvard encontraron que el consumo frecuente de estas bebidas puede aumentar la edad del primer período en las niñas.
El trabajo, que fue publicado en Human Reproduction, analizó los datos de 5,583 niñas de entre los 9 y 14 años, y es el primero en examinar la relación entre las bebidas azucaradas y la edad de la primera menstruación.
Los investigadores siguieron a este grupo de niñas entre 1996 y 2001 y encontraron que aquéllas que bebían más de 1,5 refrescos azucarados al día, tenían su primera regla 2,7 meses antes que las que bebían 2 o menos a la semana. Y el efecto fue independiente del índice de masa corporal (IMC), la altura, la ingesta total de alimentos y otros factores de estilo de vida como la actividad física.
En el documento se concluye que las bebidas azucaradas pueden adelantar la menarquía hasta en 1 año, y esto es peligroso, ya que se incrementa el riesgo de padecer cáncer de mama en un 5 %, y señalan que este factor de riesgo modificable, "no debe pasarse por alto".
Bebidas que engordan y dañan
Karin Michels, una de las autoras del estudio, dice que las conclusiones se suman a la creciente preocupación sobre el consumo generalizado de bebidas azucaradas entre los niños y adolescentes en EE.UU., pero también en otros países. “La principal preocupación se refiere a la obesidad infantil, pero nuestra investigación sugiere que merced a las bebidas dulces, la edad de la primera menstruación se produce más temprano” señaló.
¿Por qué se produce este efecto en las niñas? los alimentos con alto índice glucémico provocan un rápido aumento en las concentraciones de insulina en el cuerpo, que a su vez pueden dar lugar a mayores concentraciones de hormonas sexuales, y como consecuencia, producen un adelanto de la menarquía.
La comunidad médica viene alertando sobre este fenómeno que se está observando en algunos países desarrollados: el adelanto de la pubertad en las niñas, cuyas causas todavía se investigan, pero una de las más señaladas es la obesidad infantil, donde las bebidas azucaradas tienen gran parte de la culpa.