Durante su breve visita por la ciudad de México, la actriz colombiana Sofía Vergara dejó en claro que a sus 40 años no se han desvanecido los deseos de tener un segundo hijo, razón por la que decidió congelar sus óvulos, los cuales espera utilizar en un futuro no muy lejano.
“Bueno, son cosas que ya a los 40 uno tiene que planear. Los años pasan tan naturales, entonces, me organicé para ver si de pronto en un futuro los necesito o no”, comentó la artista, quien es la imagen de una reconocida marca de detergentes.
Puntos clave
Vergara sabe que, aunque sigue conservando la misma figura, ya no es la misma persona que cuando tenía 20 años. Sin embargo, esta etapa ha representado muchos cambios para ella.
“Creo que una de las pocas cosas que pasan cuando tienes 40, que te vuelves vieja, es que adquieres muchísima seguridad, porque cuando tienes 20 años te preocupas por más cosas, en especial de tu imagen. Ahorita estoy en una etapa muy especial, muy bonita de mi vida, porque además siento que las cosas que hago, las hago de la mejor manera, eso me hace sentir muy bien”, agregó Sofía.
Cabe recordar que en meses recientes Sofía compartió parte del tratamiento que ha tenido que seguir el cual incluye la toma de píldoras e inyecciones de hormonas.
A través de su cuenta de WhoSay la colombiana compartió varias imágenes de su paso por tierras aztecas, y a juzgar por las fotografías se ve que Sofía disfrutó de su estancia acompañada de la comida tradicional mexicana: pozole, pan, crema, fajitas de pollo, cebolla, queso y tortillas. “Esto sí es México”, comentó en la red social.
La fecundación in vitro (FIV) es una forma de tecnología de reproducción asistida (ART, por sus siglas en inglés), lo cual quiere decir que se utilizan técnicas médicas especiales para ayudar a una mujer a quedar embarazada. La fecundación in vitro se ha utilizado con éxito desde 1978 y con mucha frecuencia se ensaya cuando han fallado otras técnicas de fertilidad menos costosas.
Existen cinco pasos básicos para el procedimiento:
Paso 1: Estimulación, también llamada superovulación. A la mujer se le administran medicamentos, comúnmente llamados fármacos para la fertilidad, con el fin de incrementar la producción de óvulos.
Paso 2: Retiro del óvulo. Se lleva a cabo una cirugía menor, llamada aspiración folicular, para retirar los óvulos del cuerpo de la mujer y es un procedimiento que normalmente se realiza en forma ambulatoria en el consultorio médico.
Paso 3: Inseminación y fecundación. El espermatozoide del hombre se coloca junto con los óvulos de mejor calidad y se almacenan en una cámara ambientalmente controlada. La mezcla de espermatozoide y óvulo se denomina inseminación.
Paso 4: Cultivo del embrión. Cuando el óvulo fertilizado se divide, se convierte en un embrión y el personal de laboratorio lo vigilará regularmente para asegurarse de que esté creciendo de manera apropiada. En aproximadamente cinco días, el embrión tiene varias células que se están dividiendo activamente.
Paso 5: Transferencia del embrión. Los embriones son colocados dentro del útero de la mujer de 3 a 5 días después del retiro y fecundación del óvulo. El procedimiento se hace en el consultorio del médico mientras la mujer está despierta. El médico inserta un tubo delgado (catéter) que contiene los embriones dentro de la vagina, a través del cuello uterino hasta el interior del útero. Si un embrión se pega o se implanta en el revestimiento del útero y crece allí, se presenta el embarazo.
La fecundación in vitro se hace para ayudar a que una mujer quede en embarazo y se utiliza para tratar muchas causas de infertilidad, como:
- Edad avanzada de la mujer (edad materna avanzada)
- Trompas de Falopio obstruidas o dañadas (puede ser causado por enfermedad inflamatoria pélvica o cirugía reproductiva previa)
- Endometriosis
- Factor de infertilidad masculino, incluyendo disminución del conteo de espermatozoides y obstrucción
- Infertilidad inexplicable