A cinco semanas de debutar como mamá, la actriz estadounidense Scarlett Johansson regresó al gimnasio para esculpir su figura y deshacerse de los kilos de más que ganó durante su embarazo.
Acompañada de su prometido, el periodista francés Romain Dauriac, la artista se fue motiva a sus sesiones de entrenamiento, en donde varios aparatos, entre ellos, la caminadora, escaladora y pesas ya la estaban esperando.
Y es que, luego de traer al mundo a un hijo, el deseo de muchas madres se relaciona con recuperar la silueta en el mayor tiempo posible. No obstante, debe de haber tiempo para todo.
Por ejemplo, en el caso de Johansson, sería comprensible que debido a sus compromisos con su carrera como actriz tenga que volver a lucir igual de esbelta que antes de quedar en cinta.
No obstante, si se somete a un riguroso plan de entrenamiento, al único que podría estar perjudicando sería a su hijo. Y es que, de acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina, al realizar ejercicio de manera excesiva en las primeras semanas después de aliviarse se corre el riesgo que se deje de producir leche materna.
Aunque para algunas mamás esta situación no les sea de mayor importancia, lo que es un hecho es que la leche materna es un alimento sumamente completo y nutritivo, ya que contiene células que combaten las enfermedades, denominadas anticuerpos, que ayudan a proteger a los lactantes contra gérmenes, enfermedades e incluso, el síndrome de muerte súbita del lactante.
Si pensabas que la leche de fórmula podría suplir a la leche materna, estás en un error, puesto que ésta no puede igualar la composición química exacta de la leche materna, especialmente las células, las hormonas y los anticuerpos que combaten las enfermedades.
Antes de ponerte a hacer ejercicio se recomienda consultar a un doctor, quien te recomendará, en base a tu situación, en qué momento será ideal hacerlo y con qué frecuencia.
A juzgar por la imagen, se nota que Johansson se cuidó a lo largo de su embarazo, por lo que no se ve con una figura con varios kilos. Uno de los errores de muchas mamás primerizas es que durante esa etapa piensan que tienen que tienen que comer doble cantidad, lo cual es un grave error.
Una manera de comenzar a bajar de peso inmediatamente después de dar a luz es comenzar desde cero. Por ejemplo, empezando con salir a caminar unos minutos, subir y bajar escaleras, para luego seguir con otra actividad más compleja.
Si se hizo ejercicio en la etapa de gestación, como yoga prenatal, esto ayudará a que la condición física y elasticidad no se pierdan por completo, además que se conservará la figura en lo máximo posible, claro, siempre y cuando exista un balance con la alimentación.
