En la antigüedad muchas madres y sus bebés no sobrevivían al embarazo y al proceso de nacimiento, debido al poco desarrollo de la medicina moderna. Esto no deberá preocupar a la artista neoyorkina puesto que las condiciones para tener un hijo en la actualidad son las óptimas.
Puntos clave
- La actriz espera a su primer hijo.
- Durante su embarazo deberá acudir a constantes revisiones médicas.
- También deberá llevar una dieta balanceada rica en vitaminas y minerales.
Una de las prioridades de Wilde será llevar un buen cuidado prenatal, el cual consiste en tener una buena nutrición y hábitos saludables antes y durante el embarazo, realizarse exámenes prenatales frecuentes, así como ecografías de rutina para detectar problemas con el bebé.
También es necesario que se realice pruebas de detección de rutina para conocer anomalías de la presión arterial, problemas del tipo sanguíneo (Rh y ABO), diabetes, trastornos genéticos, inmunidad contra el sarampión alemán (rubeóla) e infecciones de transmisión sexual.
Seguramente Olivia necesitará escoger un médico que les brinde servicios de cuidado prenatal, durante el parto y después de éste. Las opciones de médicos en la mayoría de las comunidades son, entre otras médicos especializados en obstetricia y ginecología, enfermedades obstetras certificadas, médicos de familia, enfermeras profesionales o auxiliares médicos que trabajes con un médico general.
Algunas de las metas del cuidado prenatal son: vigilar tanto a la mujer embarazada como al feto a lo largo de todo el embarazo, buscar cambios que puedan llevar a embarazos de alto riesgo, explicar los requerimientos nutricionales durante y después de la gestación y brindar apoyo a la paciente.
Ahora que está esperando la llegada de la cigüeña, la actriz que participó en la serie Dr. House tendrá que hacer una dieta balanceada y tomar suplementos ricos en vitaminas y minerales que incluya al menos 0.4 miligramos de ácido fólico, el cual disminuye los riesgos de desarrollar ciertas anomalías congénitas, como la espina bífida.
Muchas mujeres embarazadas se cuestionan sobre con qué frecuencia deberán ir a visitar al médico. La Biblioteca Nacional de Medicina sugiere hacerlo cada 4 semanas durante las primeras 28 semanas de gestación; cada 2 a 4 semanas desde la semana 28 hasta la semana 36 y semanalmente a partir de la semana 36 hasta la llegada del parto.
Tener un bebé es un motivo de orgullo y felicidad, pero también es una gran responsabilidad, algo de lo que seguramente estará consciente Olivia Wilde.
Con información de la Biblioteca Nacional de Medicina.
