El Instituto Nacional Neurológico de Desórdenes y Golpe, (NINDS, sus siglas en inglés) con sede en Maryland, Estados Unidos, define este trastorno como una alteración del Sistema Nervioso Autónomo, quien regula automáticamente muchas funciones importantes del organismo, como el pulso, la presión, la temperatura y la respiración.
En entrevista para Radio Fórmula, la actriz manifestó que actualmente ya se encuentra mejor de salud. Aunque cuando iniciaron sus malestares en marzo de este año, los doctores no encontraban qué enfermedad le provocaba dichos síntomas.
Puntos clave
- Por los síntomas la diagnosticaron con depresión
- La fatiga crónica el principal sintoma de la disautonomía
- No hay cura para esta enfermedad
“Fui a un Hospital pero no me encontraron nada, después con un cardiólogo y me dijo que estaba en estado de depresión, ¡pero eso no te causa pérdida de memoria! Los médicos de la especialidad de Arritmias del Hospital General, fueron los que dieron con el resultado de mi enfermedad”, compartió.
El Dr. Jaime Bravo Silva, reumatólogo y especialista en Hiperlaxitud Articular del Hospital San Juan de Dios de la Universidad de Chile, asegura que la enfermedad es confundida constantemente con otros padecimientos debido a sus síntomas.
“El síntoma más frecuente de la disautonomía es la fatiga crónica. En casos esporádicos, la pérdida del conocimiento que puede seguir de convulsiones y confundir el diagnóstico con Epilepsia. Desafortunadamente como la persona se siente mal y no se le encuentra la causa, se puede dictaminar depresión”.
De la Garza, expresó que tiene esperanzas de recuperarse por completo, pues está siguiendo un tratamiento y especificaciones exactas que los médicos le dieron.
Después de varias investigaciones, el NINDS encontró que no hay cura para la disautonomía, pero se puede controlar con medicamentos basados en fórmulas como fludrocortisone, midodrine, y la efedrina.
También recomiendan incorporar hábitos a su vida diaria para sobre llevar la enfermedad, como realizar 5 ó 6 comidas diarias, evitando una acumulación excesiva de sangre en el estómago, estar bien hidratado, aumentar la ingesta de sal, evitar estar de píe por varias horas, entre otros, dependiendo de los síntomas del paciente.