Nunca pudo superar la estatura de 1,42 metros (4 pies y 8 pulgadas). Tampoco logró superar el éxito que lo llevó a la fama cuando apenas tenía 10 años, aunque siempre pareció más pequeño.Tal vez por eso es que conmocionó tanto la noticia del fallecimiento de Gary Coleman, el viernes 28, debido a una hemorragia intracraneal, producida por un traumatismo que le provocó una caída en su casa, en Utah. Su representante, John Alcantar, fue el encargado de dar el anuncio: “Estamos muy tristes de comunicar que el señor Gary Coleman ha fallecido”. A su lado, lo acompañaban su esposa, Shannon Price, y otros familiares cercanos.
La sonrisa eterna
Puntos clave
- Sufría desde su nacimiento de nefritis, una enfermedad que destruye el riñón.
- Pero falleció por otra causa: una hermorragia cerebral producida por una caída.
¿De qué estás hablando, Willis?, fue una de las frases que caracterizaron a Arnold, su personaje en la serie “Blanco y negro” (el título original en inglés era “Different Strokes”), que se emitió durante ocho años (de 1978 a 1986).
Posiblemente, su sonrisa quede en la historia del cine como una de las más tiernas y simpáticas de todos los tiempos. De hecho, fue el personaje de este pequeñito inocente y travieso de ojos inmensos el que hizo posible que la serie haya sido una de las más vistas en la historia de la televisión.
Pero detrás de la sonrisa, el pequeño Gary escondía una triste realidad: desde su nacimiento sufría de nefritis, una enfermedad autoinmune que destruye el riñón. Esa fue la causa por la que se detuvo su crecimiento de niño. A los 5 años se hizo un transplante de riñón; luego se realizó el segundo transplante a los dieciseis. Pero de todas formas, siempre necesitó diálisis permanente.
Si bien interpretó diversos roles en algunos largometrajes y participó de programas de TV, jamás volvió a conseguir el éxito que tuvo como el pequeño “Arnold”. Incluso, en 2001, aceptó trabajar como empleado de seguridad en un centro comercial de Los Ángeles. Había quedado en bancarrota por un mal manejo del dinero. Aunque los problemas financieros venían desde antes: sus padres habían utilizado las ganancias de Coleman, dejándole al actor apenas un pequeño porcentaje de los ahorros. En los últimos años, fue varias veces noticia debido a sus problemas de salud o por protagonizar ciertos episodios de violencia.
Sin embargo, su muerte tuvo tanto impacto, que muchas personas se niegan a aceptarla, compartiendo a través de las redes sociales exactamente el mismo mensaje: "¿De qué estás hablando, Willis?"