Para algunos quizás suene absurdo, sin sentido o simplemente una actividad pasada de moda. Sin embargo, otras personas han asegurado que el sumergirse dentro de su interior ha ayudado a sanar varias áreas de su vida y a encontrar la paz.
Puntos clave
Tal es el caso de “Roco”, músico mexicano que se popularizó por ser vocalista de la extinta banda “La Maldita Vecindad y los Hijos del Quinto Patio”, agrupación de mediados de la década de los ochenta que además de mezclar varios ritmos como rock, ska y reggae, se caracterizó por llevar este mensaje a la sociedad.
Para él, entrar en un estado de tranquilidad y unidad, significa encontrar un equilibrio con sigo mismo y con todos los demás. “La paz es una parte esencial, es el medio, el camino y el fin para una sociedad mucho más justa, mas armónica donde la creatividad, la imaginación el amor, pueden fluir y generar más oportunidades para todos”, comentó.
El ser portavoz de estos ideales le ha permitido adentrarse más en otras de las necesidades del ser humano y encontrar ahí, lo que él considera “una parte esencial de la felicidad”.
“La espiritualidad es poder valorar lo que vemos día a día en nosotros y en lo que nos rodea, valorar que cada mañana que nos despertamos, ese es el momento para agradecer que estamos vivos y también para dimensionar con nuestra intensión, nuestra mente y corazón cómo va a estar ese día”, manifestó.
Actividades sencillas como sentarse a comer junto a sus familiares, compartir historias con sus amigos y seres queridos, o tratar de robar sonrisas a la gente, son algunos de los aportes que hacen que el cantante sienta más valor y más deseos por seguir viviendo.
En su búsqueda por tener un mejor contacto con la naturaleza, el artista se mudó a Tepoztlán, un pueblo mágico ubicado en el estado mexicano de Morelos, donde además de adquirir lecciones de vida, ha aprendido a relacionarse mejor con su entorno.
“Ahorita estoy feliz. Todas las mañanas poder salir al cerro e inmediatamente ver las cataratas y las pozas es genial, caminar diario dos o tres horas en la naturaleza, es increíble. Vivir en un espacio donde todo el tiempo está la naturaleza es una relación que hemos dejado mucho de lado y es fundamental para el ser humano”, consideró.
Este tipo de experiencias han hecho que el músico haya modificado varios de sus hábitos que van desde su manera de ser, vivir, hasta la forma de alimentarse ya que en los últimos años implementó a su menú un alimento que considera esencial para nuestro organismo.
“Es importante que integremos a la dieta la espirulina, esta alga milenaria, sagrada, que es un organismo unicelular que no ha cambiado en los últimos 30 millones de años y tiene todas las proteínas, vitaminas, minerales que necesita el cuerpo humano”, apuntó.
Además, dijo ejercitarse a través del baile y la acrobacia, actividades que realiza mientras se encuentra ensayando para alguna de sus presentaciones.
Finalmente, el intérprete del tema “Pachuco” instó a la gente ha encontrar su espiritualidad debido a que las últimas tecnologías han permitido un aislamiento entre las personas de la realidad.
“Hay que apagar la televisión y prender las conversaciones con la familia, los amigos, darnos mucho más tiempo para convivir de humano a humano, viéndonos a los ojos más que otras herramientas como lo son las redes o los medios masivos”, concluyó.
Tener una buena espiritualidad contribuye a fomentar la salud mental, revela estudio.
Investigadores de la Universidad de Missouri examinaron los resultados de tres encuestas donde se entrevistaron a budistas, católicos, judíos, musulmanes y protestantes sobre sus personalidades, sus niveles de espiritualidad, así como su salud física y mental.
Tras revisar este estudio se encontró que las personas que tenían un mayor grado de espiritualidad tenían un mejor nivel de salud mental con niveles más bajos de neuroticismo y una mejor extraversión.