A pesar de tener dinero y la fama, el cantante y compositor estadounidense no parece del todo feliz y para muestra sus confesiones que hizo al diario The New York Times donde reconoció tener depresión, el cual lo atribuye al atentado terrorista a las Torres Gemelas de Manhattan, hace más de diez años.
Puntos clave
“Tuve una especie de niebla mental, pero no tuvo nada que ver con el alcohol”, manifestó. “Mi mente no estaba bien. No me concentraba. Entré en una profunda depresión después del 9/11; me dejó sin aliento, y ni siquiera estoy seguro de que ahora ya me haya recuperado”.
“Realmente me duele que el hombre pueda hacer algo así contra el propio hombre. En ese entonces hubo como una ruptura, y me tomó el tiempo el darme la media vuelta y poner de nuevo los pies en el suelo”, agregó.
Tras este hecho, el intérprete de éxitos como “Uptown girl” probó toda clase de bebidas alcohólicas con las que trató de olvidar sus problemas; sin embargo al día de hoy el músico ya casi no las consume.
“Empecé con whiskey Dewars White Label, y luego, cuando ya estaba en una etapa muy pesada, bebía vodka. El vodka es una bebida muy fuerte a base de alquilos. Podía tomarlo en tragos puros o podía mezclarlo con algo. Ahora ya no puedo ni olerlo. Me enferma”, manifestó.
Aunque ha intentado dejar de beber en varias ocasiones, el artista reconoció seguir bebiendo una copa en ocasiones y ni siquiera agrupaciones como Alcohólicos Anónimos han logrado quitarle la sobriedad: “a veces se me va un poquito la mano”.
Cabe recordar que Billy Joel ha estado en rehabilitación en 2002 y 2005 en el centro Betty Ford por abuso de sustancias. Ahora nos quedan claro las verdaderas razones por las que se internó.
La depresión es un trastorno médico serio que afecta el organismo, el estado de ánimo y los pensamientos. Afecta la manera de comer y dormir, la percepción que uno tiene de sí mismo y la manera de pensar.
Al igual que Billy Joel, cualquier persona puede sufrir este problema, sin importar la edad, grupo étnico, estado socioeconómico o género. Tan solo en los Estados Unidos los investigadores calculan que cada año 12 por ciento de las mujeres (más de 12 millones de mujeres) y casi el siete por ciento de los hombres (más de seis millones de hombres) sufren trastornos depresivos.
Existen tratamientos eficaces para la depresión que incluyen antidepresivos y psicoterapia. La mayoría de las personas mejora más rápidamente si utiliza ambos.
Con información del Instituto Nacional de Salud Mental.