Es uno de los músicos más destacados de la historia del rock mexicano.
Junto con sus compañeros de Caifanes, Saúl Hernandez, Sabo Romo, Alejandro Marcovich y Diego Herrera marcaron con su música a varias generaciones con temas como “La célula que explota”, “Afuera”, “No dejes que”, “Mátenme porque me muero”, “Aquí no es así” y “La negra Tomasa”.
Puntos clave
Tras más de 15 años de ausencia, volvieron a los escenarios con varias giras por México y Estados Unidos con el fin de recordar los viejos tiempos e interpretar los éxitos que los consagraron.
Recientemente se presentaron en la Cumbre Tajín 2012, evento celebrado en el estado de Veracruz que reunió la tradición de la cultura totonaca con lo mejor de la danza, la música y el teatro. Tan solo el día de su presentación, la agrupación mexicana logró reunir a más de 50 mil asistentes, agotando todas las entradas para esa función.
No obstante, los conciertos, viajes y ensayos ya han representado un significativo desgaste para los miembros de la banda.
“Después de una tocada, además de todo el estrés que se maneja antes y durante la presentación, como que es una carga de energía muy fuerte, toda la gente se está lanzando al escenario, es como una retroalimentación que sale del escenario y lo que regresa te deja muy cargado”, comentó André.
Es por eso que el percusionista recurre frecuentemente a masajes de relajación como el tailandés, una técnica donde se trabajan varias áreas del cuerpo mediante los dedos, codos, rodillas y antebrazos, auxiliado de algunos métodos quiroprácticos.
“Es más activo que el masaje normal, nada más te tiendes en la cama y te mueves. Es de mucho más estiramiento, ya había hecho antes el tailandés pero la versión totonaca no la conocía, por eso un masajito cae muy bien después de una tocada”, comentó Alfonso y dijo recurrir a otras métodos cuando no tiene al alcance a algún masajista.
“Un par de tequilas ayudan a relajar después de un concierto, ver la tele o muchas veces nos quedamos en el hotel en el cuarto de alguno de nosotros platicando y aterrizando para irse a dormir, porque normalmente llegas a la cama, te acuestas y te quedas viendo el techo por horas”.
Asimismo, señaló que procura controlar la tensión con muchas actividades que le permiten tonificar su cuerpo debido a que su trabajo lo lleva al agotamiento.
“Cuando estoy en México trato de hacer mucho ejercicio, hacemos unas clases de gimnasia, hay que tratar de mantenerse en forma un poco y a parte corro para mantenerme en condición porque es un desgaste fuerte las giras”, finalizó.
Además, indicó tratar de llevar una buena alimentación pese al ritmo de trabajo que lleva actualmente.
“Vas de hotel en hotel, de aeropuerto en aeropuerto, muchas veces te agarra la comida en cualquier lado. Tratamos de comer lo más sano posible, realmente no es una dieta muy estricta, pero sí tratamos de cuidar lo que comemos, que sea balanceado. Un poco de todos los grupos alimenticios, comer más frutas y verduras, no abusar de los azucares y demás”, agregó y dijo sentirse muy seducido por una comida en especial.
“Mi platillo favorito son los huazontles, algo raro, pero me encantan capeados o sin capear” finalizó.