Los hombres bajos han sido un poco estigmatizados en la sociedad a causa de su estatura. La visión cultural de los hombres más altos como más protectores, físicamente más dominantes y capaces, se ha instalado en la mente de muchas mujeres, creando una especie de prejuicio contra los de menor estatura.
No se sabe si las mujeres prefieren a los altos a causa de la presión de la sociedad que impone como cultura estos parámetros (así como la mujer delgada) o si la preferencia se debe a factores evolutivos.
Pero lo cierto es que de acuerdo a un estudio reciente, los hombres bajitos acumulan una serie de ventajas muy jugosas: tienden a tener un ingreso más alto, son más propensos a permanecer monógamos, y son en general mejores novios y esposos, dicen los científicos.
Para examinar los efectos de la altura masculina en diversos aspectos de las relaciones a largo plazo, el investigador Dalton Conley, de la Universidad de Nueva York, y un equipo, recogieron datos de un estudio de la Universidad de Michigan, que ha estado recopilando datos demográficos de 5,000 familias durante casi 50 años.
Esta información sirvió para determinar cómo la altura de un hombre impacta en diferentes áreas de su relación. Ellos analizaron dos conjuntos de datos, entre 1986 y 2009 sobre 3,033 parejas heterosexuales de entre 23 y 45 años. Los investigadores clasificaron a estos hombres en tres grupos: bajos, medios y altos.
Y los resultados dejarán boquiabiertas a las mujeres: los hombres bajos tenían menos probabilidades de divorciarse, eran más propensos a compartir las tareas del hogar, y a ser el sostén económico de la familia. Aunque eran algo menos propensos a casarse (tal vez por ser menos elegidos que los altos) cuando llegaban al matrimonio, las tasas de divorcio fueron de un 32% menos que en los hombres altos y medios.
¿Entonces conviene elegir un hombre bajo como marido? Podría ser. Los investigadores creen que los hombres altos pueden ser "conscientes de la situación de privilegio que se les confiere por su estatura", lo cual los hace propensos a colaborar menos en los trabajos domésticos, por ejemplo.
Sin embargo, los hombres bajos colaboran más y ganan más dinero. Los investigadores hallaron que el 79% de los hombres bajos logran ganar bastante dinero, en comparación con el 70% de los de talla media y contra el 71% de los hombres altos.
Para terminar, sólo falta saber qué mujeres eligen los hombres bajitos: los científicos notaron un patrón consistente: tendían a elegir mujeres menores que ellos y menos educadas. El 21% de estos hombres permanecían al lado de mujeres que no habían terminado la escuela secundaria, en comparación con el 16% de los hombres de estatura media y el 12% de los hombres altos.
Después de saber todo lo que descubrió la ciencia sobre ellos, ¿te quedan dudas sobre cuál es el hombre ideal?
