En la búsqueda de la dieta perfecta, un nuevo concepto ha empezado a repercutir con fuerza entre los expertos especializados en planes para bajar de peso: subir de peso es un proceso mucho más rápido que bajar de peso.
Y así, aunque parezca una obviedad, este concepto apunta directamente a aquellas personas que viven permanentemente en un "sube y baja".
"Los cuerpos no suben y bajan de peso indefinidamente", expresó el doctor David Ludwig, director del programa “Peso óptimo para vivir” del Hospital de Niños de Boston, en un artículo de la publicación de la Asociación Médica Americana.
Según el experto, hay una cascada de cambios biológicos que impulsan a que el cuerpo mantenga su nuevo peso. Otro factor que puede dificultar la pérdida de peso son algunas hormonas y también ciertos procesos químicos del cerebro que regulan el impulso inconsciente de comer y el modo en que el cuerpo responde al ejercicio.
El programa del doctor Ludwig está dedicado a la evaluación y el tratamiento de niños obesos o con sobrepeso. Participa en varias investigaciones clínicas y epidemiológicas que buscan identificar factores de la dieta que producen obesidad. Las bebidas cola y la comida rápida figuran dentro de estos factores.
Pero el Dr. Ludwig no es el único que se refiere al problema de las personas que bajan y suben de peso reiteradamente.
El doctor Kelly Brownwell, director del Centro Rudd de Políticas Alimentarias y Obesidad, de la Universidad de Yale afirma: “Cuantas más dietas se hayan seguido, más difícil le resulta al organismo bajar de peso”. Y agrega: “las llamadas dietas yo-yo pueden afectar el bienestar físico de los individuos e incluso hasta cambiar su fisiología porque al hacer dieta, aumenta la grelina, que es la hormona del hambre. A su vez, disminuye la leptina, que es la hormona de la saciedad. El resultado es que uno siente más hambre.
A menudo, una dieta yo-yo puede hacer perder masa muscular, que será reemplazada con grasa cuando se recupere el peso perdido”, agregó.
La edad también puede contribuir al aumento de peso. “Al envejecer, el metabolismo se pone más lento y necesitas menos comida y calorías. Pero si no se modifica la ingesta calórico para acompañar al metabolismo, seguramente se empezará a ganar peso. Por el contrario, se puede controlar el peso si se adopta un estilo de vida saludable, se hace ejercicio regularmente, se maneja el estrés y se duerme lo suficiente”, concluyó el doctor Brownwell.