En el futuro, el secreto para vivir más años podría estar concentrado en la simple toma de una píldora, o en la forma de una vacuna. La metformina, un medicamento que se prescribe para tratar la diabetes, es según expertos médicos, una opción viable para prolongar la vida de las personas por arriba de los 100 años.
Un estudio previo certifica esta propiedad extra de la metformina, y ahora el gobierno autoriza las pruebas, que comenzarán en el invierno de 2016.
La metformina es un medicamento común, de bajo costo y ampliamente usado para ayudar a controlar los niveles de azúcar en las personas con diabetes tipo 2. Sin embargo, un estudio de la Universidad de Cardiff, en Reino Unido, realizado en 2014 reveló que la medicación tiene un efecto secundario muy atractivo, el de ayudar a vivir hasta un 15% más.
Esos hallazgos -publicados en la revista Diabetes, Obesity and Metabolism- se basaron en una investigación con más de 180,000 personas durante 6 años, donde se concluyó que la droga como posible fuente de longevidad, podría beneficiar tanto a personas con o sin diabetes.
Para los científicos británicos, esa es una conclusión reveladora y podría constituirse en uno de los grandes descubrimientos de esta era. Y creen que la metformina puede desacelerar el envejecimiento al aumentar el número de moléculas de oxígeno liberados en una célula.
Las pruebas oficiales de la metformina como agente anti-vejez que aprobó la FDA, se denominan Targeting Aging with Metformin o TAME. Mientras se preparan para el inicio, los científicos del Colegio Albert Einstein de Medicina de Nueva York y otros, están reclutando alrededor de 3,000 participantes voluntarios de entre 70 a 80 años. Es un ambicioso proyecto de $50 millones.
Los científicos quieren desarrollar una vacuna anti-envejecimiento con esta droga, y que al recibirla, se ralentice el proceso de envejecimiento. Sin embargo, esto no debe confundirse con la eterna juventud o con la vida eterna, sino con sumar años a la vida gozando de mejor salud.
El crecimiento de la esperanza de vida en el mundo es de 2 años más por década.
Más importante que la cura del cáncer
Si se prueba la eficacia de la metformina, la prevalencia de muchas enfermedades relacionadas con el envejecimiento se podría reducir, como por ejemplo, la demencia.
Matt Kaeberlein, de la Universidad de Washington, Seattle, dijo en un artículo de Nature que “los años de experiencia con el uso de metformina, en combinación con los datos de su impacto en el proceso de envejecimiento en las personas, lo convierten en un buen candidato para una primera prueba clínica” refiriéndose a la búsqueda de una fórmula anti-aging que tanto desvelo causa a los investigadores de todo el mundo.
El profesor Gordon Lithgow, experto del Instituto Buck de Investigación sobre el Envejecimiento en California y uno de los asesores del estudio, dijo a The Telegraph: “Ampliar la vida útil de la población puede ser incluso más beneficiosa para la humanidad que la búsqueda de una cura para el cáncer”.
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