Estados Unidos se encuentra dividido en estos días por un tema que ha sido, y será, controversial: el aborto. La Corte Suprema volvería a decidir la suerte de este procedimiento en junio, según un documento filtrado a la opinión pública por el sitio de noticias Politico.
La problemática del aborto abarca una complejidad de niveles: de salud, políticos, morales, religiosos. De un lado están las personas que consideran que el aborto debe ser legal, para garantizar que la decisión que debe tomar una mujer sobre terminar un embarazo se realice en un entorno médico seguro. Del otro, están los que creen que el aborto es un acto criminal.
Esto implica también distintas miradas sobre cuándo comienza la vida o cuándo una persona "existe" en términos legales.
La historia ha demostrado que son partes difíciles, sino imposibles, de reconciliar. Para entender el rol que el sistema legal ha tenido en este debate, quizás la única parte que puede fluctuar entre la legalidad y la ilegalidad, hay que ir varias décadas atrás.
Qué es Roe vs Wade
En 1969, Norma McCorvey, tenía 21 años y estaba embarazada de su tercer hijo, producto de una relación ocasional. Su primera hija no vivía con ella y a su segundo hijo lo había entregado en adopción.
Con una vida compleja —su padre abandonó a la familia y su madre era una violenta alcohólica— McCorvey, quien sufría de depresión, intentó practicarse un aborto en Dallas, Texas, pero las pocas clínicas que realizaban el procedimiento habían sido clausuradas por las autoridades.
Aún embarazada, fue referida a dos abogados que estaban buscando casos como el de ella —mujeres que intentaran un aborto— y, bajo el nombre ficticio de Jane Roe, la demanda contra Henry Wade, el entonces fiscal del condado de Dallas, pasó por todas las instancias judiciales hasta llegar a la histórica decisión de la Corte Suprema el 22 de enero de 1973.
McCorvey nunca asistió a una sesión en la corte y en el medio de la batalla legal dio a luz a su bebé, que también fue dado en adopción. Con los años, declaró que había sido usada por abogados ambiciosos, y se convirtió en la cara visible de grupos anti aborto. Murió en febrero de 2017 a causa de una falla cardíaca, a los 69 años.
El fallo Roe vs Wade convirtió en legal la práctica del aborto en todo el país, aunque los estados siempre mantuvieron el poder de decidir sobre en qué instancias practicarlo, y en qué momento de la gestación.
Hasta el fallo de 1973, el aborto estaba prohibido a nivel nacional, por lo que las mujeres que necesitaban el procedimiento terminaban, si tenían dinero, en la camilla de un médico que lo realizaba por fuera de la ley, o en manos de personas inescrupulosas sin habilidades médicas, que practicaban los abortos en entornos poco higiénicos.
La ruta legal desde 1973
La decisión de la Corte Suprema no detuvo a los estados que han estado históricamente en contra del aborto de imponer restricciones. De hecho, los tradicionalmente conservadores como Mississippi y Alabama siguieron desafiando a a la ley en los tribunales, demandas contra entidades como Planned Parenthood o la Women's Health Organization.
Decenas de causas han circulado por distintos circuitos judiciales del país desde aquella ley histórica. Mientras tanto, la suerte de las mujeres en necesidad de un aborto ha dependido del lugar en donde viven.
En mayo de 2022, la Corte Suprema acordó escuchar a las partes de una de estas demandas, Dobbs vs Jackson Women's Health Organization, para analizar la constitucionalidad de la ley de Mississippi que prohíbe el aborto luego de las 15 semanas de gestación.
Otro poderoso estado que ha buscado consistentemente abolir la ley a favor del aborto es Texas. Los defensores del derecho de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo ya se han encontrado con muchas barreras cuando en 2021 el estado promulgó una ley prohibiendo la mayoría de los abortos después de las seis semanas de embarazo.
Las leyes en ambos estados desafían abiertamente a Roe vs Wade.
El escenario actual
Si en junio la Corte Suprema decide revocar Roe vs Wade, es posible que 19 estados prohibirían la práctica del aborto por completo.
Hasta el momento, 15 estados y el Distrito de Columbia tienen leyes que protegen el aborto. Catorce tienen leyes restrictivas; 16 estados no tienen legislaciones, ni a favor ni en contra; y 5 lo prohíben, siguiendo leyes anteriores a Roe vs Wade.
Es la primera vez en la historia de la Corte Suprema, que el borrador de un documento se filtra a la prensa, antes de un fallo final. Sus sesiones deliberativas suelen ser altamente secretas.
Si la Corte Suprema falla a favor de mantener el fallo de 1973, seguramente continúen las batallas legales, pero habrá un "paraguas legal" que seguirá protegiendo el derecho al aborto.
En su último editorial, la revista The Lancet describe el texto de la Corte Suprema filtrado como "alarmante". Y dice: "la disponibilidad de un paquete esencial de intervenciones de salud sexual y reproductiva debe ser un derecho fundamental para todas las mujeres, incluida la educación sexual integral; acceso a anticonceptivos modernos; servicios de aborto seguro; prevención y tratamiento del VIH y otras enfermedades de transmisión sexual; prevención y tratamiento de la violencia de género; consejería para la salud sexual; y servicios para la infertilidad".
Si la Corte Suprema se promulga a favor de revocar el fallo, el mapa del aborto cambiará radicalmente. Podría ser un gesto que otorgaría más poder a los estados. Miles de las mujeres que necesitan el procedimiento se verían forzadas a tomar decisiones que hasta pueden afectar sus vidas.
También Estados Unidos iría en contra de la tendencia mundial de darle un marco legal a la práctica: se convertiría en uno de solo cuatro países que han restringido el derecho al aborto en las últimas tres décadas. La corta lista incluye a Polonia, El Salvador y Nicaragua.
Fuentes: informes periodísticos, History, KHN, Planned Parenthood, NYT.