El moho puede crecer en casi cualquier sitio. Pero limitar la humedad puede ayudar a prevenir que crezca en interiores y cause problemas de salud.
Si el moho aparece se debe eliminar, porque las esporas suelen provocar reacciones alérgicas, asma y otros problemas respiratorios crónicos. Los más afectados, según algunas investigaciones, son los niños más pequeños.
¿Por qué nos afecta el moho?
Los factores que empeoran las alergias o el asma se denominan desencadenantes. El moho es un desencadenante común. Cuando el asma o las alergias empeoran debido al moho, se dice que somos alérgicos al moho.
Hay muchos tipos de moho y todos necesitan agua o humedad para proliferar.
Los mohos producen pequeñas esporas que no se pueden ver a simple vista. Estas esporas flotan a través del aire, en espacios al aire libre e interiores.
Los mohos pueden comenzar a proliferar en espacios interiores cuando las esporas caen sobre superficies húmedas, comúnmente proliferan en sótanos, baños y cuartos de lavado. Es importante revisar los rincones, techos y armarios o roperos (closets) y quitar esas manchas.
¿Cómo hacerlo? Usa agua y detergente para eliminar el moho de las superficies, y luego seca completamente las áreas afectadas. Si el moho se desarrolla en materiales absorbentes, como en paneles del techo, quizá tengas que cambiarlos.
Para evitar que el moho vuelva, es importante deshacerse del agua o las goteras que hacen que crezca. Se debe reducir la humedad en interiores a no más de un 60 por ciento. Para lograrlo, se recomienda:
- Proveer una ventilación al exterior a las secadoras de ropa, los baños y otras áreas que produzcan humedad.
- Los baños deben estar bien ventilados de forma que la humedad de las paredes y el suelo se seque rápidamente
- Usar acondicionadores de aire y deshumidificadores, si es posible.
- Usar extractores de aire mientras cocinas, lavas los platos o limpias.
- Si los materiales de construcción o los muebles se mojan, límpiarlos y secarlos en un plazo de 48 horas.
- Aislar las superficies frías, como las ventanas, las paredes exteriores, los tejados y los suelos para prevenir la condensación.
- Si rentas o alquilas, habla con tu casero para que revise y se ocupe de quitar el moho.
- Antes de comprar o rentar, revisa bien la casa. El moho es perjudicial para la salud y es muy difícil eliminarlo una vez que se ha instalado.
