Haití está a sólo unos días de las elecciones del 28 de noviembre, para la que hay 19 aspirantes, cuatro de los cuales pidieron postergarlas debido a la crisis.
Además de los 1.250 muertos, el número de hospitalizaciones es de 20.687, y hay 52.715 casos de contagio registrados, según la información oficial, pero el doctor francés Gerard Chevallier, que trabaja con el ministerio de Salud haitiano, asegura que las cifras oficiales "subestiman" la cantidad real.
Puntos clave
- La epidemia ya se ha cobrado 1.250 vidas
- Cientos de miles de haitianos viven en campos de refugiados
"Los reportes son imperfectos. Hay zonas donde la gente se muere y nadie se entera", dijo el médico francés, que trabaja junto al epidemiólogo haitiano Renaud Piarroux en la evolución de la enfermedad.
"Dos tercios del territorio son sólo accesibles a pie", enfatizó en una entrevista con la agencia AFP.
Chevallier advirtió que el país necesita enfocarse en intentar detener la expansión del cólera, una enfermedad que estuvo erradicada de Haití durante un siglo hasta que reapareció hace un mes, a mediados de octubre, cuando fueron detectados los primeros casos del brote.
"La cantidad de focos de contagio aumenta y los focos que aparecieron hace un mes aún no se extinguieron. Había una veintena de focos al principio del cólera, y ahora hay unos cincuenta en un centenar de comunidades afectadas", dijo.
El experto, que asesora a las autoridades haitianas, explicó que "el comportamiento de la epidemia es raro", con contagios que se dan de forma "rápida y grave".
"No todo el país está afectado, pero la epidemia va a extenderse", advirtió Chevallier.
Cientos de miles de haitianos viven en campos de refugiados en pésimas condiciones higiénicas luego del sismo de enero, que dejó a cerca de 1,3 millones de personas sin hogar.
Los esfuerzos para contener el mal se vieron obstaculizados en días recientes como consecuencia de los choques entre manifestantes y tropas de la ONU, a los que acusaban de haber traído el cólera.