La industria de la moda tiene la reputación de rechazar a las mujeres consideradas “gordas”, pero una agencia inglesa rompió con la creencia al contratar a Tess Holliday, que usa el talle 22. En enero de 2014 esta maquilladora profesional de 29 años firmó un contrato con la Agencia de Modelos MILK, y estará entre su staff de bellezas como la primera modelo plus size. Ya fue contratada por la empresa Torrid, que comercializa indumentaria en talles grandes.
Según declaró al diario Daily Mail, se siente feliz, y afirmó: “no hay una sola manera de ser mujer o de ser bella. Todos merecemos un lugar".
La mujer de Mississippi se llama en realidad Ryann Hoven, pero eligió llamarse Tess cuando empezó a trabajar como modelo alternativa. También tomó el apellido de su novio, a quien conoció por las redes sociales. Conoció a Nick en 2012, cuando él la felicitó por Tumblr por servir de inspiración de muchas mujeres. Ella le respondió y empezaron una relación que se fortaleció cuando él se mudó para vivir con ella en Los Ángeles.
Además de su trabajo en las pasarelas, Tess tiene una ocupación de tiempo completo como mamá de Rylee, su hijo de 9 años, a quien busca en el colegio y ayuda a hacer la tarea. Quiere que crezca lleno de amor y como un niño libre, y valora mucho la fuerza que le dio para salir adelante, ya que para ella su hijo fue su mayor impulso.
Antes de ser modelo trabajaba como maquilladora de artistas, pasión que tiene desde la adolescencia. Tess tiene varios tatuajes en su cuerpo, entre ellos el de Miss Piggy, el personaje de los Muppets, que es una de sus fuentes de inspiración.
Sobre su peso confiesa que no le importa lo que piensen los demás, y cuando le dicen que tiene que hacer algo con su figura tan rotunda, solo le da más fuerza para seguir adelante tal cual es. “Al final del día, esas personas no pagan mis cuentas”, comenta.
La idea de una modelo rellenita no es algo nuevo, ya que a comienzos de año, la iconográfica revista Sports Illustrated incluyó por primera vez a una de talla XL en la portada de su sexta edición de trajes de baño. Fue la australiana Robyn Lawley, de 25 años, facciones perfectas y un cuerpo lleno de curvas.
Para esa revista, tener en su portada a una mujer de talle 12 fue un hecho histórico. La joven lució uno de los trajes de baño de su propia colección, cuyos talles van del 10 al 20. Lawley dice que no sabe si es o no una modelo plus size. “solo me considero una modelo, que trata de ayudar a que las mujeres en general acepten sus cuerpos”, enfatiza.
Los cuerpos como los de Tess y Robyn se tienen como “casos raros”. Según datos publicados en un artículo del journal WWD (Womens Wear Daily), considerado una especie de “biblia” de la moda, en EE.UU. el talle 12 es considerado plus size para la industria, aunque paradójicamente, el talle promedio de las estadounidenses es el 14. Pero una cosa es tener el talle 14 y otra es usarlo. WWD comenta que los fabricantes y diseñadores encuentran difícil entrar en el mercado plus size porque la gente sencillamente no compra la producción.