Un nuevo análisis de 324 estudios sobre la expansión de Medicaid comprobó que sumar más personas a este programa no solo mejora la salud sino que le ahorra dinero al sistema.
Medicaid es el programa de salud federal —gerenciado por los estados— para las personas de bajos ingresos. Aunque es una iniciativa nacional, con estándares nacionales, cada estado tiene poder para decidir sobre algunos aspectos del programa: por ejemplo quien califica de acuerdo al nivel de ingresos, o si la persona tiene que demostrar que trabaja o tiene intención de hacerlo para tenerlo.
La Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio (ACA, popularmente conocida como Obamacare), recomendó a los estados expandir Medicaid, para que más personas accedieron a doctores, pruebas preventivas y tratamientos. ¿Qué significa exactamente esto? Que la ley sugirió que los estados establecieran pautas para calificar más amplias, para que personas con salarios un poco más altos —pero que todavía luchan por pagar sus cuentas médicas— pudieran ser elegibles.
Al 1 de agosto de 2019, 36 estados y el Distrito de Columbia habían expandido Medicaid. Catorce decidieron no hacerlo.
El análisis del equipo de Medicaid de la Kaiser Family Foundation comprobó, entre otras cosas, que los estados que expandieron Medicaid:
- Experimentaron aumentos significativos en la cobertura
- Tienen un mejor acceso a la atención
- Lograron brindan más cuidado médico a las poblaciones vulnerables
- Ahorraron dinero del presupuesto estatal para atención de salud.
Aunque algunos aspectos críticos —como conseguir una cita, o una orden para ver a un especialista— siguen siendo desafíos.
El gobierno federal cubrió el 100% del costo de la expansión en los primeros años de ACA, y en el futuro seguirá cubriendo el 90%.
A junio de 2019, Medicaid tiene 72.2 millones de inscriptos, de los cuales 6.6 millones son menores de edad bajo el Programa de Seguro de Salud Infantil (CHIP).
La inscripción a Medicaid y CHIP está abierta todo el año, aunque un momento ideal para saber la situación en tu estado y averiguar si eres elegible es durante el Período Abierto de Inscripción en los mercados de seguros de ACA. Este período en la mayoría de los estados va del 1 de noviembre al 15 de diciembre (aunque algunos estados que gerencian sus propios mercados tienen ventanas más largas).
Medicaid es la principal fuente de cobertura de salud del país. El 30% de los beneficiarios adultos de este programa son latinos, aunque el porcentaje varía dependiendo del estado.
Un informe de Unidos US de 2017 mostró que el 36% de los niños que tienen CHIP son latinos.
Medicaid cubre un amplio espectro de servicios, desde médicos y hospitalarios, hasta de vacunas y cuidado materno infantil.
Los estados tienen opciones adicionales de cobertura y pueden optar por cubrir a otros grupos, como las personas que reciben servicios de salud en el hogar y en los centros comunitarios, o niños en hogares de cuidado temporal.
Inmigrantes y Medicaid
Todos los ciudadanos, nacidos en el país o naturalizados, tienen derecho a tener Medicaid o CHIP, por supuesto, si cumplen con los requisitos de elegibilidad.
Los inmigrantes a los que se define como “no ciudadanos calificados” generalmente también son elegibles para estas coberturas, si cumplen con las normas de ingresos y residencia de su estado.
Para obtener cobertura de Medicaid y CHIP, muchos "no ciudadanos calificados" (como las personas con green card) tienen un período de espera de 5 años. Esto significa que deben esperar 5 años después de recibir el estatus de inmigrante "calificado" antes de poder obtener cobertura de Medicaid y CHIP. Sin embargo, los estados tienen el poder para reducir ese tiempo de espera o simplemente eliminarlo.
El término "no ciudadano calificado" incluye:
- Residentes permanentes
- Personas con status de asilo
- Refugiados
- Cubanos
- Personas en libertad condicional por al menos un año
- Personas que hayan entrado al país de manera condicional antes de 1980
- No ciudadanos víctimas de violencia doméstica
- Personas que estén tramitando sus visas por ser víctimas de tráfico humano
- Una persona que enfrente la deportación a la que se le haya concedido un período de gracia.
- Miembro de una tribu india reconocida a nivel federal o indio americano nacido en Canadá
Es importante saber que los inmigrantes indocumentados no tienen derecho a participar de estos programas, sin embargo, algunos estados han avanzado con iniciativas locales para cubrirlos.
Por ejemplo, California cubre a los menores de edad sin papeles a través de Medi-Cal, la versión estatal de Medicaid (unos 250,000 niños y adolescentes), y está debatiendo en la Legislatura la posibilidad de cubrir también a los adultos sin papeles.
En las familias con estatus migratorio mixto es importante que los padres sepan que sus hijos nacidos en los Estados Unidos pueden beneficiarse de Medicaid o de CHIP, si la familia cumple con los requisitos de elegibilidad.
En los últimos tiempos, muchas familias no han aprovechado estos servicios que algunos miembros del hogar pueden recibir por derecho, por temor a que sus datos se compartan con autoridades de migración.
Este temor se acrecentó en 2018, cuando la administración Trump anunció que reforzaría una norma conocida como "carga pública", por la que las personas que están aplicando para tener su residencia permanente o su ciudadanía podrían ver afectado el proceso si recibieron en el pasado beneficios del gobierno.
Sin embargo, el sitio de internet del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) es claro al respecto. Dice: "La solicitud de Medicaid o CHIP, o la obtención de subsidios para los costos de seguro de salud en los mercados de seguros, no hace que alguien sea una 'carga pública'. Esto significa que no afectará sus posibilidades de convertirse en residente legal permanente o ciudadano de los Estados Unidos".
El HHS aclara que hay una excepción. "Las personas que reciben atención a largo plazo en una institución a expensas del gobierno pueden enfrentar barreras para obtener su green card".