Cuando llamaron al 911 pidiendo ayuda para Lamar Odom, el personal del burdel Hoff’s Love Ranch informo que el paciente había consumido cocaína y sustancias para mejorar el rendimiento sexual. El ex basquetbolista adquirió pastillas de “Reload” y “Libimax Plus”, ambos suplementos comercializados como “Viagra Herbal” para mejorar el rendimiento sexual.
Los productos etiquetados como “100% natural”, “herbal” u “orgánico” casi siempre crean la impresión de ser inocuos y de no provocar efectos adversos en el organismo. Sin embargo, los dos consumidos por Odom son peligrosos, y hasta fueron objetados por la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA).
En octubre de 2013, la FDA. advirtió a los consumidores que no compraran o consumieran “Reload,” un producto promocionado y vendido en varias tiendas y sitios de Internet para activar el funcionamiento sexual. El aviso fue emitido cuando el laboratorio de la entidad confirmó que “Reload” contenía sildenafil, el ingrediente activo aprobado y comercializado bajo la marca comercial Viagra, entre otras, para tratar la disfunción eréctil.
La FDA informó que la presencia de este ingrediente no declarado puede interactuar con los nitratos contenidos en drogas como la nitroglicerina, recetadas a pacientes con diabetes, alta presión, alto colesterol o enfermedades cardiacas. Por eso en estos casos el uso de silfenafil puede bajar la presión sanguínea hasta niveles peligrosos.
Al pie de la advertencia se incluye la imagen del producto que promete 72 horas de energía. En la misma se ve la lista de ingredientes naturales que contiene, entre ellos gingko biloba y panax ginseng, aunque no se menciona la presencia de sildenafil. Una dirección de Internet impresa en el envase remite a un sitio de citas japonés, y también incluye una dirección de correo electrónico que no funciona.
En cuanto al otro producto usado por Odom, Libimax Plus, también fue denunciado por la FDA por sus ingredientes ocultos. En ese caso incluye tadafil, una droga poderosa que se suministra solo bajo prescripción médica, y que también puede tener efectos adversos si se combina con los nitratos.
La FDA advierte a los consumidores que hay una creciente tendencia a comercializar y consumir suplementos dietarios o alimentos promovidos para incrementar el funcionamiento sexual, bajar de peso o lograr más músculos. La mayoría vienen etiquetados como “100% natural”, aunque suelen tener sustancias químicas o drogas ocultas. La entidad explica que no puede probar o identificar todos los productos potencialmente peligrosos del mercado. Por eso pide cautela a los consumidores al comprar o usar productos incluidos en las categorías mencionadas.
Suplementos: naturalmente más accesibles
El problema de los suplementos naturales es que no deben pasar los mismos estándares de calidad y aprobación que los medicamentos. Por eso permite un mercado secundario que se ofrece por Internet sin necesidad de receta. Y muchos tienen el plus de parecer inofensivos porque llevan el rótulo de natural, sin que haya una regulación que avale su consumo seguro.
Otro aspecto tentador es su precio: según informaron en el burdel, Lamar Odom pagó $14,99 dólares por cada pastilla de Libimax Plus, mientras que una de Viagra de 100 mg puede llegar a costar alrededor de $40 dólares. Con esta última suma se pueden conseguir frascos de hasta 30 pastillas de suplementos mágicos y naturales, de venta libre.
Ante el peligro que implica el consumo de este tipo de productos. la FDA desaconseja su uso. Pero si de todos modos alguien decidiera utilizarlos, recuerda que importante consultar al médico de inmediato si aparecen síntomas adversos.
No todos están condenados
A pesar de la "mala prensa" que tienen algunos productos naturales que prometen mejorar el rendimiento sexual, hay otros que parecen tener cierta efectividad.
Natural Standard informa que el extracto de raíces de ginseng es posiblemente efectivo para tratar la disfunción eréctil (ED), e indica que su consumo en comprimidos de 1000 a 1800 mg parece mejorar el funcionamiento sexual en hombres con esta condición.
La entidad hace referencia a un estudio realizado por investigadores del Departamento de Urología de la Universidad de Ulsan, en Corea, que demostró que el ginseng rojo coreano podría ser eficaz en pacientes con disfunción eréctil. Durante 16 semanas se trató a un grupo de voluntarios con tres dosis diarias de 900 mg de extracto de esta raíz. El 60% de los participantes reveló tener una mejor erección y una mayor rigidez del pene.
Esta sustancia, combinada con otras hierbas, demostró ser eficaz para tratar la eyaculación precoz. Se utiliza en forma de crema, aplicándola en el glande antes de tener relaciones sexuales.
Además del ginseng, Natural Standard menciona otros productos naturales para tratar la disfunción eréctil, como la leguminosa butea, el extracto de lupines o L-Arginina, las hojas de coleus, el azafrán y la corteza de yohimbe, De todos modos, aclara que no siempre se puede demostrar su efectividad.