El sobrepeso y la obesidad están aumentando en toda América Latina y el Caribe, con un impacto particularmente alto en mujeres y niños, según un nuevo informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, FAO y la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Por otra parte, la obesidad es un grave problema entre los inmigrantes que llegan a los Estados Unidos y también en los hispanos de segunda generación. Las tasas de obesidad en adultos latinos superan el 30% en 29 estados del país y en algunos llega a ser mayor de 42.6%, señala el estudio divulgado por The State of Obesity, un proyecto de Trust for America’s Health y la Robert Wood Johnson Foundation.
¿Qué hacer frente a esta realidad?
En un artículo publicado por MedPage Today reconocidos expertos en salud y nutrición mencionan algunos caminos para combatir la epidemia de obesidad.
- Walter Willett, MD, DrPH, Harvard Chan School of Public Health: El alto consumo de bebidas endulzadas con azúcar es un factor particularmente importante para el sobrepeso y la obesidad, y la combinación entre educación e impuestos puede ser beneficiosa. Podemos ver esto en algunas ciudades como Nueva York, donde las intervenciones yuxtapuestas, incluyendo educación, eliminación de la soda, y mejores alimentos en las escuelas han llevado a una modesta reducción de la obesidad infantil. Podemos hacer mucho más, incluyendo impuestos a la soda e incorporando límites a la publicidad agresiva de la comida chatarra orientada a los niños.
- Connie Diekman, MEd, RD, Washington University - St Louis: La reducción del riesgo de obesidad requiere compromisos de la industria alimentaria, profesionales de la salud, padres, escuelas, comunidades y la industria de seguros. En otras palabras, este es un proceso que requiere el reconocimiento del alcance del problema y un compromiso para cambiar el ambiente.
- Yoni Freedhoff, MD, Bariatric Medical Institute: La única manera probable que veamos modificaciones en las tasas de obesidad es si empezamos a provocar cambios en el entorno que sirve como su vector primario. Si seguimos centrándonos exclusivamente en la responsabilidad personal, no es probable que lleguemos a ninguna parte.
- David Ludwig, MD, PhD Boston Children's Hosspital: Lo más potente es reducir el consumo de carbohidratos procesados (con alta carga glucémica) - incluyendo azúcares añadidos, granos refinados y productos de papa. Tiene menos potencial seguir centrándose en la reducción de la grasa en la dieta.
- Lona Sandon, PhD, RD, UT Southwestern: El reto es reconstruir el medio ambiente junto con los cambios sociales y culturales y la forma en que hacemos las cosas. Por ejemplo, la norma social es conducir un automóvil para ir trabajar en lugar de usar el transporte activo, como andar en bicicleta. La reconstrucción del medio ambiente, como la adición de carriles protegidos para bicicletas, será condición para hacer que más personas se sientan cómodas con el uso del ciclismo como forma de transporte.
Reforzar políticas públicas
En consonancia con la opinión de los expertos, el informe de la FAO y de OPS destaca que los países de América Latina y el Caribe deben reforzar y ampliar sus políticas públicas para promover el consumo de alimentos saludables.
La regulación de la publicidad de productos ultraprocesados, las normas de etiquetado y los impuestos específicos para bebidas azucaradas, son algunas de las iniciativas ya en curso. Estas deben ser complementadas con políticas para aumentar la oferta de alimentos saludables, como los sistemas de compras públicas y su conexión con la agricultura urbana y periurbana, la alimentación escolar y la implementación de circuitos cortos de producción y comercialización de alimentos, entre otras.