Por qué ocurre la resequedad ocular

Definición

Es una afección causada por la falta de lágrimas, que son necesarias para la lubricación normal de los ojos y para eliminar partículas y cuerpos extraños.

Nombres alternativos

Disminución del lagrimeo; Ojos resecos

Por qué ocurre la resequedad ocular
| Foto: GETTY IMAGES

Consideraciones

Si usted presenta resequedad en los ojos, experimentará una sensación de ardor, abrasión o picazón. Igualmente, usted puede sentir cansancio o fatiga en los ojos después de leer, incluso durante períodos de tiempo cortos. Si usted utiliza lentes de contacto, probablemente se sentirá incómodo. El hecho de presentar resequedad en los ojos durante un tiempo puede conducir a abrasiones diminutas en la superficie de los ojos.

Causas

Las causas comunes de resequedad en los ojos abarcan:

  • Envejecimiento
  • Resequedad en el medio ambiente o en el lugar de trabajo (viento, aire acondicionado)
  • Exposición al sol
  • Exposición activa o pasiva al humo del cigarrillo
  • Medicamentos para los resfriados o para las alergias
  • Una lesión en el ojo u otro problema con los ojos o los párpados (como párpado caído o protrusión de los ojos)
  • Síndrome de Sjögren que abarca resequedad en los ojos, la boca y las membranas mucosas, y a menudo artritis reumatoidea u otro trastorno articular
  • Cirugía ocular previa

Cuidados en el hogar

Ensaye con lágrimas artificiales, disponibles ya sea en gotas o ungüentos. Estos últimos duran más, pero son más espesos y pueden causar visión borrosa por un corto tiempo después de que se los aplica en el ojo.

  • No fume. Evite el consumo indirecto de tabaco, el viento directo y el aire acondicionado.
  • Use un humidificador, especialmente en invierno.
  • Si es posible, deje de usar medicamentos para los resfriados y las alergias, ya que pueden estar causando los síntomas.
  • Parpadee a propósito más a menudo y descanse los ojos.

Cuándo contactar a un profesional médico

Consulte con el médico si:

  • Presenta enrojecimiento o dolor en los ojos.
  • Presenta descamación, secreción o una lesión en el ojo o el párpado.
  • Ha tenido traumatismo en un ojo o presenta protrusión del ojo o párpado caído.
  • Presenta dolor, inflamación o rigidez articular.
  • También presenta resequedad en la boca.
  • Su resequedad en los ojos no responde a los cuidados personales en cuestión de unos días.

Lo que se puede esperar en el consultorio médico

El médico tomará la historia clínica y llevará a cabo un examen físico, incluyendo un examen ocular minucioso.

El médico puede hacer las siguientes preguntas para ayudar a entender mejor la resequedad en los ojos:

  • ¿Por cuánto tiempo ha tenido la resequedad en los ojos? ¿Afecta a uno o ambos ojos?
  • ¿La tiene todo el tiempo o se presenta únicamente en determinados momentos, con ciertas actividades o en determinados lugares?
  • ¿La resequedad parece estar relacionada con exposición al viento, al polvo, a químicos, al sol o a la luz?
  • ¿Afecta la visión?
  • ¿Produce dolor?
  • ¿Los párpados se cierran fácilmente?
  • ¿Ha notado alguna secreción de los ojos?
  • ¿Hay algo que empeora la resequedad en los ojos?
  • ¿Hay algo que la mejora?
  • ¿Ha ensayado con lágrimas artificiales? ¿Le ayudan?
  • ¿Está tomando medicamentos? ¿Cuáles?
  • ¿Se sometió alguna vez a una cirugía o sufrió alguna lesión en los ojos o en la nariz?
  • ¿Tiene alergias?
  • ¿Ha estado utilizando cosméticos nuevos?
  • ¿Presenta otros síntomas como resequedad en la boca o molestia articular?

El médico puede llevar a cabo exámenes de las lágrimas que pueden ayudar a diagnosticar la resequedad en los ojos. Se pueden prescribir lágrimas artificiales.

Referencias

Tu EY, Rheinstrom S. Dry eye. In: Yanoff M, Duker JS, eds. Ophthalmology. 3rd ed. St. Louis, MO: Mosby Elsevier;2008:chap 4.

Carsons S. Sjögren's syndrome. In: Firestein GS, Budd RC, Harris ED Jr., et al, eds. Kelley's Textbook of Rheumatology. 8th ed. Philadelphia, Pa: Saunders Elsevier;2008:chap 69.

Yanoff M, Cameron D. Diseases of the visual system. In: Goldman L, Ausiello D, eds. Cecil Medicine. 24th ed. Philadelphia, Pa: Saunders Elsevier; 2011:chap 431.

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