Un ciudadano francés, de 43 años, se convirtió en el primer hombre del mundo en recibir dos trasplantes faciales y pasó a ser conocido en los medios como "el hombre de las tres caras".
El doctor Laurent Lantieri, especialista en trasplantes de manos y cara, realizó el primer trasplante en 2010, cuando Jérôme Hamon, que sufre una condición genética que le provocó tumores desfigurantes en el rostro llamada neurofibromatosis tipo 1, tenía alrededor de 30 años. 
La operación fue un éxito en esa oportunidad, pero en 2015 contrajo un resfriado común y recibió antibióticos que eran incompatibles con el tratamiento inmunosupresor que seguía para evitar el rechazo del material trasplantado.
Los primeros signos de rechazo comenzaron en 2016 y en noviembre del año pasado, el rostro con necrosis tuvo que ser removido.
Entonces, permaneció sin cara en el hospital Georges Pompidou, en París, durante dos meses a la espera de una nueva donación. Durante todo ese tiempo, no pudo ver, hablar ni escuchar, informó BBC News.
Segundo trasplante
En enero, cuando un nuevo donante facial estuvo disponible, Lantieri y su equipo realizaron el segundo trasplante de cara. Pero antes de realizar esta intervención, los médicos tuvieron que reemplazar toda la sangre del cuerpo del Hamon para eliminar algunos anticuerpos potencialmente preocupantes de los tratamientos anteriores.
"Hoy, sabemos que un trasplante doble es factible, ya no está en el campo de la investigación", dijo el doctor Lantieri al periódico francés Le Parisien.
La primera cara de Hamon fue donada por un hombre de 60 años. Con su segundo rostro trasplantado, Hamon dijo que logró descender unas décadas.
"Tengo 43 años. El donante tenía 22 años. Así que me he vuelto 20 años más joven", bromeó el hombre en una entrevista en la televisión francesa esta semana.
Resultados
Lantieri dijo que él y su equipo pronto publicarían los resultados de la intervención en una revista médica y que esperaba que casos como el de Hamon siguieran siendo la excepción.
El primer trasplante de cara se realizó en Francia en 2005 en una mujer llamada Isabelle Dinoire, que murió en 2016 después de desarrollar cáncer. Desde entonces se han realizado alrededor de 40 operaciones de trasplante de cara en todo el mundo.
