Las autoridades sanitarias de Arabia Saudita, el país en donde se identificó el virus MERS por primera vez en 2012, están desconcertadas. Una escalada de casos —casi 50 en sólo seis días—, están haciendo pensar que este virus que causa un grave cuadro respiratorio esté mutando para diseminarse con más fuerza.
Según reporta la Organización Mundial de la Salud (OMS), desde septiembre de 2012 hasta los casos de estos últimos días, ya se han registrado 257 diagnósticos de MERS, con 76 muertes.
Puntos clave
- Hasta ahora se registraron 257 casos de MERS.
- Y casi 50 de ellos fueron sólo en seis días.
- Temen que el virus esté mutando.
Abdullah-Al-Rabia, ministro de Salud de Arabia Saudita, q dijo a la prensa que se está investigando la causa de este aumento estrepitoso de casos, y calmó los ánimos diciendo que no hay que tomar medidas sanitarias extra porque "el MERS no se disemina fácilmente de persona a persona". El funcionario fue removido de su cargo tras estas declaraciones.
Sin embargo, la comunidad científica internacional teme que realmente el virus esté cambiando su genética y volviéndose más eficaz para incrementar los contagios. La suma de casos en pocos días avala esta teoría.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) informan que, hasta el momento, el MERS se registró en pacientes de 11 países: Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Túnez, Reino Unido, Qatar, Oman, Malasia, Kuwait, Jordania, Italia y Francia. La mayoría de los pacientes fuera de Medio Oriente, fueron viajeros.
Hasta ahora no se han registrado casos en Estados Unidos, y los CDC no han lanzado un alerta para limitar los viajes a la región del planeta que está sufriendo este brote. Sí recomiendan medidas sanitarias básicas: lavarse las manos, prevenir el contacto con personas enfermas, desinfectar superficies de uso frecuente, juguetes, etc.
El MERS pertenece a la familia de los coronavirus, es decir que es primo hermano del SARS, virus que causó una epidemia de Sindrome Agudo Respiratorio Severo en 2009. Se cree que el reservorio de este virus, es decir el animal que lo porta y lo transmite sin enfermar, podría ser el camello, utilizado como medio de transporte cotidiano en los países de Medio Oriente.
También hay murciélagos en los que se ha hallado este virus.
Los síntomas comienzan con fiebre, tos y dolores generales hasta que se desarrolla un cuadro respiratorio severo que impide respirar. Hasta ahora, un tercio de los pacientes afectados ha muerto.
No existe hasta el momento una cura, o una vacuna preventiva.