Un trabajo publicado en el Journal Internacional de Epidemiologìa confirma que hay un vìnculo entre el consumo de nueces y cacahuates (o maníes) y un bajo índice de mortalidad. Sin embargo, este efecto protector no se obtiene al consumir mantequilla de maní.
La investigación fue realizada por expertos de la Universidad de Maastricht con un grupo de 120,852 personas de ambos sexos de entre 55 y 69 años, del Estudio de Población Holandés que se realiza desde 1986. Entre ellos hubo 3.202 habitantes de ambos sexos que consumieron por día al menos 0.35 onzas (10 gramos) de cacahuates o nueces, equivalentes a medio puñado. Del grupo total de la muestra se observaron 8.823 muertes desde el comienzo de los registros. 
Las causas más frecuentes de mortalidad fueron las enfermedades respiratorias o neurodegenerativas y la diabetes, seguidas de cáncer y enfermedades cardiovasculares. Las mismas se dieron tanto en hombres como en mujeres.
El consumo de nueces de los participantes se obtuvo preguntando el tamaño de las porciones y la frecuencia de la ingesta de cacahuates, nueces y mantequilla de maní. Luego se analizó su relación con las muertes ocurridas y su causa específica.
La relación inversamente proporcional entre el consumo de nueces y cacahuates y la muerte por deficiencias cardiovasculares ya había sido confirmada en estudios estadounidenses y asiáticos. Por ejemplo, en un estudio de 2008 publicado en el Journal de Nutrición realizado por investigadores del Departamento de Ciencias de la Nutrición de la Universidad del Estado de Pensilvania.
Durante el mismo se realizaron ensayos clínicos y epidemiológicos que demostraron los beneficios para el corazón que da el consumo de nueces y cacahuates, que ayudan a reducir en un 35% el riesgo de trastornos cardiacos. Estos alimentos ayudan a bajar el colesterol “malo” o LDL, modifica el aporte de ácidos grasos en la dieta, aporta macronutrientes, proteína vegetal y fibra, y micronutrientes como potasio, resveratrol y arginina que tienen un comprobado efecto cardioprotector.
La diferencia con este nuevo estudio es que se buscaron efectos benéficos de estos alimentos en otro tipo de enfermedades como cáncer, diabetes, deficiencias respiratorias o neurodegenerativas y diabetes.
Los cacahuates y nueces contienen compuestos como ácidos grasos mono y poliinsaturados, vitaminas, fibra, antioxidantes y otros compuestos bioactivos que posiblemente contribuyen a bajar la tasa de mortalidad. Pero la mantequilla elaborada con esos mismos cacahuates contiene agregados como sal y aceites vegetales, conocidas sustancias perjudiciales para la salud. Ambos dan como resultado una composición distinta a los cacahuates, que podrían inhibir su efecto protector.
La Academia de Nutrición y Dietas incluye a la mantequilla de maní en su lista de grasas saludables. De todos modos, algunas tienen un alto contenido de sal, aceites vegetales, azúcar y emulsificadores que interfieren y malogran las bondades del alimento en sí.
