Si comes comida rápida, tanto en tu casa como fuera, que sea ocasionalmente. Y cuando lo hagas, modera el consumo de las porciones de comida y bebidas. Aprende a seleccionar los alimentos que eliges para armar tu menú.
Recuerda que el exceso de frituras, grasas saturadas y azúcares te pueden predisponer al sobrepeso u obesidad, así como a enfermedades cardiovasculares.
No hay nada como preparar en casa una comida completa, variada y equilibrada. Además, es de menor costo cocinar en casa que comprar comidas preparadas. Sólo necesitas organizarte para comer en casa o llevarte comida preparada en casa como almuerzo.
De acuerdo con una investigación realizada por la Universidad de Carolina del Norte, aumentó la tendencia a consumir comida rápida en los últimos años, tanto dentro como fuera de casa.
Según datos de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), de 2007 a 2010 los adultos consumieron un 11.3% de su ingesta diaria de calorías de comida rápida en los EE.UU.
Y lo que es más alarmante, cerca de un tercio de los niños y adolescentes consumen alguna comida rápida al día. De 2011 a 2012 consumían 12.4% de su ingesta diaria de calorías proveniente de comida rápida.
Comida rápida se asocia a ganancia de peso
Esta tendencia ascendente ha tenido enormes repercusiones negativas, ya que el consumo de comida rápida se asocia a ganancia de peso. Sin embargo en la actualidad muchos restaurantes de comida rápida ya ofrecen alternativas de menú con menos calorías.
Es tan alta la incidencia de obesidad infantil en EE.UU., que algunos restaurantes de cadenas de comida rápida ya tienen entre sus estrategias la reducción del porcentaje de calorías en sus menús infantiles.
Así, se incluyen también frutas y verduras y menor porción de papas fritas. Está en tus manos saber seleccionar lo que comes.
Esta es una buena medida. Sin embargo, se necesitan muchas acciones en conjunto para el control del sobrepeso y obesidad. Entre ellas, la creación de buenos hábitos alimentarios, tanto dentro como fuera de casa, y una mayor actividad física.
Cuando comas comida rápida ten en cuenta lo siguiente:
- Elige las versiones simples y porciones pequeñas. Evita porciones gigantes de comida.
- Prefiere aderezos bajos en calorías o "light".
- Elige acompañamientos bajos en calorías; por ejemplo, ensalada en lugar de papas a la francesa.
- Siempre incluye ensaladas con verduras frescas en tu menú.
- Sustituye los postres por fruta.
- Selecciona métodos al grill o parrilla en lugar de frituras.
- Selecciona los mejores desayunos de comida rápida.
Haz una elección sabia de lo que bebes
- Sustituye la soda o refresco por agua natural, agua mineral o té helado sin azúcar.
- Selecciona métodos al grill o parrilla en lugar de frituras.
- Selecciona los mejores desayunos de comida rápida.
- Haz una elección sabia de lo que bebes.
- Sustituye la soda o refresco por agua natural, agua mineral o té helado sin azúcar.
- Si tomas soda o refresco, que sea un vaso de 9 a 12 onzas (250 a 350 ml aproximadamente). Si tienes más sed toma agua sola.
Ten en cuenta que muchas sodas contienen como edulcorante jarabe de maíz alto en fructosa. Su sabor propicia que tomes más cantidad.
¿Qué puedes comer en un restaurante de comida rápida?
Hay varias alternativas en la selección de menús; por ejemplo:
-Una ensalada completa: de pollo, atún o queso mozzarella.
-Papas fritas, porción pequeña (opcional).
-Fruta de postre.
-Agua natural.
Está en ti la frecuencia, la cantidad y lo que eliges de comida rápida. Siempre hay opciones saludables y sustitutos bajos en grasa y calorías. ¡Y mantente atento a las porciones!