Si bien ya pasaron diez años desde el estreno, Kate sigue siendo recordada como la chica de la película “Cómo perder a un hombre en diez días”, que inexplicablemente ¡se quería deshacer del atractivo Matthew McConaughey! De todos modos, se mantiene bella y espléndida como siempre, aùn cuando hayan pasado los años.
Kate es fanática de la actividad física, y confiesa que si bien odia las estocadas y las sentadillas, en cierta forma también las ama porque son ejercicios ideales para tonificar las piernas y los glúteos.
Pero lo que más le gusta es la actividad aeróbica como correr y sobre todo bailar: para ella la música es lo que le da verdadera energía para ponerse en movimiento. También se dice que lleva consigo una soga y que cuando tiene algo de tiempo ¡se pone a saltar un rato!
En un tiempo fue fanática del pole dance o baile del caño, y hasta tenía uno instalado en su casa para practicar. Esto la ayudó a bajar de peso después de ser madre ya que había quedado con bastantes libras de más.
Revela que le encanta hacer Pilates, ya que junto con el baile son disciplinas que ayudan a elongar, mantener los músculos flexibles y largos y fortalecer la zona media, en especial cuando se han tenido hijos.
A la hora de las comidas dice que se mantiene lejos de los alimentos procesados, los fritos y los platos grasosos. Practica el control de porciones y por eso se da algunos permisos, pero en poca cantidad.
Su dieta diaria es de 1,800 calorías, pero lo baja a 1,500 si necesita perder algo de peso por alguna causa. Adora el yogur y lo incluye en sus comidas cada vez que puede.
Evita los excesos a la hora de comer, y segú describe, no come ni demasiada carne roja, ni demasiados lácteos, ni demasiado gluten, ni demasiado pescado (aunque le cueste, según confiesa).
Admite que debería comer más semillas de lino, espirulina y jugos verdes, a los que considera una forma haragana de comer vegetales. Siempre que puede elige productos sin gluten, que en su casa comen sin chistar.
Desde hace un tiempo se convirtió en empresaria y es cofundadora de Fabletics, una marca que ofrece indumentaria deportiva y para el tiempo libre. En muchas de las gráficas es la modelo que muestra los diseños, mientras sonríe, que es lo que le sale con naturalidad y la hacen irresistible. Incluso para Matthew.