La cantante y actriz Lindsay Lohan pasó la Navidad con varios amigos, entre ellos Patrick Aufdenkamp. Pero a pesar de estar en un lugar paradisíaco disfrutando de unos días de placer y descanso, la picadura de un mosquito le opacó las vacaciones ya que contrajo Chikungunya.
A raíz del incidente la ex chica Disney quiso advertir a sus seguidores de Twitter e Instagram que tuvieran cuidado para no pasar un mal momento como el de suyo. Por eso recomendó usar repelente para mantener lejos a los mosquitos y con ello evitar picaduras y eventuales contagios.
El lunes 30 de diciembre compartió más detalles de su malestar con el comentario: “Estar enfermo no es divertido. Pero a todo el mundo, Feliz Año Nuevo”. También manifestó que apreciaba compartir sus días con buena gente, y que se negaba a permitir que un virus afectara sus vacaciones (foto abajo).
A fin de noviembre Lindsay terminó su gira de Londres “Speed-the-Plow” y esperaba ansiosa sus vacaciones. Ya de vuelta de su viaje de camino a Nueva York, se la pudo ver repuesta pero algo cansada en el aeropuerto de Los Àngeles. Las primeras molestias quedaron atrás, aunque por algunas semanas persistirán las secuelas de la enfermedad, ya que según la Organización Mundial de la Salud (OMS), suele dejar dolor muscular y articular durante varios meses.
¿Qué es el Chikungunya?
El término proviene de la lengua Makonde de Tanzania y significa “retorcerse de dolor”. Este virus se registró por primera vez en Cuba y desde entonces ha estado expandiéndose sin control, en especial en las islas del Caribe.
El virus Chikungunya es endémico en países de África y Asia y se registró por primera vez en ese hemisferio en 2013. Según la Organización Panamericana de la Salud, desde esa fecha ya se han registrado más de 5,000 casos confirmados y 100,000 sospechosos en el Caribe,
Aunque este mal es transmitido por distintos mosquitos, el virus Chikungunya se ha ido trasladando de país en país del mismo modo en que lo hizo el Virus del Nilo transmitido por el mosquito Aedes Aegypti. Un viajero que llegó de una zona infectada fue el portador del mal; un mosquito lo picó, chupó la sangre infectada y empezó a diseminar la enfermedad.
Para evitar la propagación de los mosquitos, la doctora Tsoline Kojaoghlanian, pediatra experta en enfermedades infecciosas del Children’s Hospital de Montefiore, en Nueva York, aconseja no tener recipientes, macetas o floreros con agua durante varios días. En esas aguas estancadas el mosquito pone sus huevos y prolifera.
Según la Organización Mundial de la Salud(OMS) el Chikungunya causa fiebre, dolor en las articulaciones, fatiga y picazón. Algunas veces se lo confunde con el dengue ya que tiene síntomas similares.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC) informan que aun no hay una vacuna preventiva para este virus, por eso hay que controlarlo evitando las picaduras. Las mismas son más frecuentes en los meses de calor, y en los horarios donde el sol es más suave, como el amanecer y el ocaso.
Lo ideal es usar ropa que cubran el cuerpo lo más posible para evitar dejar zonas expuestas al ataque de los mosquitos. Y tal como aconseja LiLo, usar repelentes. Los más eficaces son los que contienen una sustancia llamada DEET, que se aplica directamente sobre la piel o la ropa.