Las pestañas crecen en los bordes del párpado, son altamente sensibles y realizan un movimiento reflejo (pestañeo) cuando alguna partícula o elemento extraño amenaza con ingresar al ojo y dañarlo.Tienen un ciclo vital de tres meses, luego del cual se caen y dejan lugar para el crecimiento de otras nuevas, que alcanzarán su longitud definitiva a los 60 días. Algunas personas sufren enfermedades que les pueden llegar a provocar la caída parcial o total de las pestañas.
Cómo cuidar las pestañas
Al igual que el cabello, el tiempo y el maltrato pueden dañar nuestras pestañas y se pueden volver quebradizas e incluso caerse. Estudios dermatológicos concluyen que una situación de stress, una dieta desequilibrada, problemas de tiroides, inflamaciones de párpados o quimioterapia son otros factores que pueden influir en su salud y aspecto.
Puntos clave
- Cumplen un rol muy importante como barrera de protección del ojo.
- Tienen una duración natural de tres meses y requieren de ciertos cuidados.
- Existen en el mercado productos dedicados específicamente a ayudar a crecer las pestañas.
El mercado ofrece una gran variedad de propuestas para embellecer, acondicionar o estimular el crecimiento de las pestañas, tanto de venta libre como con prescripción médica. Uno de los más renombrados, Latisse, aprovechó el marcado crecimiento de las pestañas que se identificó en pacientes que utilizaban cierto medicamento para prevenir el glaucoma. Los especialistas utilizaron esta cualidad para lanzar al mercado este producto que ya ha sido aprobado por la Food and Drug Administration (FDA).
Requiere una aplicación periódica a lo largo de la línea de crecimiento de las pestañas y a los dos meses de tratamiento se evidencian los resultados. En algunas pacientes puede llegar a provocar molestias como ojos rojos, picazón, oscurecimiento de la piel en la zona de aplicación del medicamento, pigmentación marrón permanente en la zona del iris y crecimiento de vello alrededor de los ojos si el producto se desplaza hasta esta área.
Lo que NO hay que hacer
- Frotarse los ojos o tironear de las pestañas.
- Acostarse sin remover el rimmel o máscara.
- Abusar de productos a prueba de agua o de larga duración, ya que endurecen mucho las pestañas y puede provocar que éstas se quiebren. Este tipo de cosméticos son difíciles de remover y agreden mucho la delicada raíz de las pestañas y hasta se puede llegar a dañar el folículo e inhibir su crecimiento.
- Tironear de las pestañas al utilizar rizadores mecánicos
Lo que SÍ hay que hacer
- Tener un buen estado de salud y una dieta adecuada para asegura el brillo y la fortaleza tanto del pelo como de las pestañas y cejas.
- Utilizar pads con un removedor de maquillaje suave.
- Renovar cada seis meses los cosméticos para mantener los ojos sanos. Se evita así una posible contaminación con gérmenes que pueden provocar infecciones.
- Para acondicionar las pestañas, aplicar cada noche una fina capa de vaselina o aceite para el cuidado de la piel de venta libre (Aquaphor, aceite Johnson’s) u otro de los productos de venta libre. Todos ellos actúan como una barrera que sella la humedad natural de las pestañas e impide el ingreso de partículas irritantes; habitualmente están enriquecidos con queratina o biotina, que son humectantes y ayudan a dar más volumen.
Tratamientos y recursos
Extensiones:
Para quienes deseen reforzar el aspecto de la mirada, el mercado ofrece kits de pestañas de material sintético que se adhieren a las naturales mediante un adhesivo especial. La aplicación suele suele ser costosa porque requiere mano de obra especializada, y una vez colocadas tienen una duración de dos meses si se tiene la precaución de hacer un service de mantenimiento. Si bien el resultado es notorio, el adhesivo utilizado puede llegar a debilitar la pestaña natural y provocar quiebres o roturas.
Rizadores:
Existen dos variedades de rizador, el tradicional y el térmico. El primero es un elemento metálico que se utiliza como una tijera e incluye dos planchuelas curvas cubiertas con goma. Se presionan las pestañas durante 5 a 10 segundos durante los cuales se transfiere la forma curva de la planchuela. El rizador térmico es similar pero posee una resistencia para dar calor y fijar rápidamente la forma curva sobre la pestaña. El rizador metálico tradicional también se puede utilizar con calor si se procede a aplicarle por unos segundos el secador de cabello, pero hay que verificar la temperatura antes de aplicar sobre las pestañas.
Tintura y permanente:
La tintura se utiliza para oscurecer y remarcar el aspecto de las pestañas como si se hubiera aplicado rimmel. Viene en color negro o marrón y tiene una duración de 45 días durante los cuales no es necesario aplicar máscara. La permanente se realiza con pequeños bigudíes que se adhieren a las pestañas mediante un pegamento especial. Luego se aplica el líquido para permanente que copiará en las pestañas la forma bien curva del bigudí. Luego se coloca un neutralizante y vitaminas para fortalecer.
Máscaras:
El mercado ofrece una gran variedad de máscaras con y sin color, con brillo, a prueba de agua, larga duración, para alargar, rizar o dar volumen normal y extra.