Luego que el primer ministro de Brasil, Luiz Henrique Mandetta, anunciara el miércoles 26 que una persona dio positivo para coronavirus, la región se ha puesto en estado de alerta.
Con este caso, ya todos los continentes —menos Antártica—están registrando casos de COVID-19.
El funcionario confirmó que un hombre brasileño de 61 años que había llegado a San Pablo después de viajar a Italia es el primer caso del nuevo coronavirus en Brasil.
Agregó que el hombre llegó a San Pablo —la ciudad más grande del país y de Latinoamérica— el sábado 22 de febrero sin ningún síntoma y pasó el fin de semana con su familia antes de comenzar a desarrollarlos e ir a una clínica el lunes 24.
Fue hospitalizado y dio positivo para el virus en una prueba preliminar y fue aislado. La segunda prueba confirmó que tenía el virus. El hombre estuvo en Italia desde el 9 de febrero hasta el viernes 21.
Autoridades están haciendo el mapa de contactos, para detectar posibles contagios.
Si el coronavirus se expande en la región podría tener un impacto muy fuerte en la economía de países como Argentina, Chile y Perú, que ya se están viendo afectados por el brote que comenzó en Wuhan. China es el principal comprador de cobre de estos dos últimos países, y de productos agrícolas argentinos.
El doctor Ginés Gonzalez García, ministro de Salud de Argentina, pidió a los ciudadanos que vayan al médico ante cualquier síntoma similar a la gripe, mientras este país y otros refuerzan los controles en aeropuertos.
En Perú autoridades mantienen un equipo médico en el aeropuerto Internacional Jorge Chávez de Lima, la principal puerta de entrada de viajeros al país. En Chile, el gobierno anunció la compra masiva de mascarillas para los trabajadores de salud.
En Colombia, las autoridades de migración en los aeropuertos están preguntando a los pasajeros no solo si han viajado a China recientemente, sino también si estuvieron en otros de los países afectados como Corea del Sur, Irán o Italia.
Aunque no tiene todavía casos confirmados, Panamá ha declarado emergencia nacional y ha instalado en el aeropuerto internacional de Ciudad de Panamá un cuarto de aislamiento. También requiere a los barcos que cruzan el canal que informen si vienen de zonas afectadas por el coronavirus.
México, que hasta el momento tampoco presenta casos, también está en alerta y está instruyendo a sus profesionales de salud para detectar cualquier caso sospechoso.