Si tienes hipertensión, te encantará saber que bailar mejora la presión arterial, el sueño y la calidad de vida en quienes padecen esta condición. Así lo asegura un estudio realizado por la Universidad de Granada, en España, y publicado en Medicina Clínica.
Es que el movimiento y el ritmo de la danza producen bienestar y por consiguiente, brinda beneficios inmediatos. En la investigación española participaron casi 70 mujeres mujeres de mediana edad que padecían de hipertensión o estaban en la fase de prehipertensión.
Los científicos implementaron un ensayo en el cual las participantes fueron asignadas a uno de los dos grupos: control, (donde las mujeres continuaron con sus actividades y medicación habitual) y otro grupo de terapia de baile (donde siguieron un programa, además de tomar su medicación).
Las mujeres adoptaron un plan de baile específico y progresivo realizado durante dos meses, dividido en tres sesiones semanales.
¿Qué ritmo es mejor? Los pasos de baile fueron especialmente escogidos por los investigadores para mejorar el equilibrio del cuerpo, el desplazamiento, y reubicar el centro de gravedad.
En las participantes, se analizó la presión arterial, la calidad del sueño y la calidad de vida, estas dos últimas, medidas por el Pittsburgh Sleep Quality Index y el Cuestionario Europeo sobre Calidad de Vida, respectivamente. Al cabo de ocho semanas, las mejoras fueron notables.
Las conclusiones fueron que el grupo que asistió a las sesiones de baile, experimentó mejoras significativas en los valores de la presión arterial, y una mejor calidad de vida y de sueño, en comparación con el grupo control.