Según explica el Instituto del Corazón de Texas, no se trata de un ataque cardíaco convencional, ya que en éste no siempre el corazón deja de latir. Un ataque cardíaco puede causar un PCS, pero los dos términos no tienen el mismo significado.
El Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre de los Estados Unidos (NHLBI), indica que entre 250.000 y 450.000 estadounidenses sufren un PCS cada año. Casi el 95% de ellos muere en cuestión de minutos.
Puntos clave
El paro cardíaco súbito es más común en adultos de entre 35 y 45 años de edad. Es dos veces más común en los hombres que en las mujeres. Casi nunca afecta a los niños, a menos que hayan heredado un problema congénito que aumente su riesgo.
Las personas con enfermedades del corazón tienen una mayor probabilidad de sufrir un PCS, pero puede producirse en personas que parecen sanas y no saben que tienen un problema cardíaco.
La mayoría de los casos de PCS son causados por un ritmo cardíaco muy rápido o un ritmo cardíaco muy anormal. Estos ritmos cardíacos irregulares, denominados arritmias, pueden hacer que el corazón deje de latir. Otro tipo de arritmia, denominada bradicardia, que es un ritmo cardíaco muy lento, también puede causar un PCS.
En la mayoría de la gente, el primer signo de un PCS es desmayarse o perder el conocimiento, lo cual sucede cuando el corazón deja de latir. La respiración también podría detenerse en ese momento. Algunas personas pueden sentir un mareo inmediatamente antes de desmayarse.
Dado que el PCS sucede rápidamente y sin advertencia, típicamente no puede diagnosticarse cuando está sucediendo. Pero hay estudios que los médicos pueden realizar para determinar si los pacientes presentan riesgo de un PCS como los ecocardiogramas, electrocardiogramas o la cateterización cardíaca.¿Cómo se trata un PCS?
Un paro cardíaco súbito debe tratarse inmediatamente con un desfibrilador, que es un aparato que envía una descarga eléctrica al corazón para restablecer su ritmo normal.
Actualmente hay desfibriladores disponibles en muchos lugares públicos, tales como los centros comerciales y los aeropuertos. Pero si alguien está sufriendo un PCS y no hay un desfibrilador disponible, debe realizarse la reanimación cardiopulmonar (RCP) hasta que llegue la ambulancia u otra asistencia. Las compresiones en el pecho realizadas durante la RCP mueven una pequeña cantidad de sangre al corazón y el cerebro, ganando tiempo hasta que pueda restablecerse un latido cardíaco normal.
Fuente: Instituto del Corazón de Texas