La selfie, o autofoto, se ha convertido rápidamente en una de las principales modalidades fotográficas de nuestro tiempo: sólo en 2014, se tomaron más de 93 mil millones de selfies en teléfonos Android por día. A pesar de la facilidad con la que se toman las selfies, la corta distancia de la cámara provoca una distorsión del rostro debido a la proyección, sobre todo, un aumento en las dimensiones nasales.
Un nuevo estudio, realizado por Universidad de Rutgers, encontró que las selfies pueden hacer que tu nariz parezca más grande de lo real.
Junto con el fenómeno de las selfies, aumenta el número de personas que recurren a los cirujanos plásticos para operarse la nariz, según un estudio en la revista JAMA Facial Plastic Surgery.
El estudio, “distorsión nasal en fotografías de corta distancia: el efecto Selfie”, encontró que tomar autofotos desde una distancia de 12 pulgadas distorsiona tu rostro, haciendo que la base nasal parezca un 30% más ancha y la punta nasal un 7% más ancha que lo real.
La gente, al percibir esta distorsión, pero sin tener en cuenta que fue provocada por la forma en que se toma la foto, está llevando a un aumento de solicitudes de cirugía plástica de nariz, con la esperanza de que sus selfies salgan mejor.
Según una encuesta realizada en 2017 por la Academia Estadounidense de Cirugía Plástica Facial y Cirujanos Reconstructivos (AAFPRS), el 55% de los cirujanos plásticos faciales informaron haber atendido a pacientes que deseaban verse mejor en las fotos, marcando un aumento del 13% con respecto a 2016.
No es tu nariz, es la selfie
Boris Paskhover, un cirujano plástico facial y uno de los autores del informe, dijo que los pacientes vienen a solicitar un arreglo en su nariz (rinoplastía), alegando que ésta se ve demasiado grande en las fotos. Sin embargo, Paskhover les dice a sus pacientes: "Tu nariz no se ve grande, hay distorsión cuando mantienes una cámara cerca de tu rostro", declaró.
"Las selfies hacen que tu nariz se vea más ancha y más gruesa cuando en realidad no es así, y a las personas les gusta tener una nariz más pequeña", dijo Paskhover a CNN. "Mi temor es que la generación que está afuera ahora no lo sepa".
Paskhover buscó una mejor manera de explicar a los pacientes por qué no pueden usar selfies para evaluar el tamaño de su nariz para ayudarles a mejorar su autopercepción y a tomar decisiones más informadas sobre su salud. Trabajó con Ohad Fried, un investigador del Departamento de Ciencias de la Computación de la Universidad de Stanford, para desarrollar un modelo matemático que muestra la distorsión nasal creada por las fotos tomadas a corta distancia.
En el estudio, los investigadores tomaron dos fotos de una persona: una a 12 pulgadas de distancia y otra a 5 pies de distancia. Fue fácil ver la diferencia en cuán pequeña o grande se veía la nariz desde cada distancia. La diferencia puede atribuirse a la perspectiva, dijo Paskhover.
Cuando la cámara está cerca de la cara de una persona, su nariz está más cerca de la cámara en relación con el resto de la cara, lo que hace que parezca más grande. Cuando una persona está más lejos de la cámara, la distancia relativa entre su nariz y el resto de su cara se aplana, lo que hace que su nariz se vea más proporcionada, explicó.
"Los adultos jóvenes constantemente toman selfies para publicar en las redes sociales y piensan que esas imágenes son representativas de cómo se ven realmente, lo que puede tener un impacto en su estado emocional", dijo Paskhover en un comunicado de prensa. "Quiero que se den cuenta de que, cuando se toman una selfie, en esencia están mirando un espejo funhouse portátil".
Según Paskhover, la forma en que los selfies manejan la autoimagen de las personas es un problema de salud pública.
Otras cirugías en alza
En estas últimas décadas creció también la tendencia a agrandarse los labios por considerarlos más femeninos y sensuales, una moda incentivada en gran parte por las celebrities y últimamente por el auge de las redes sociales.
En 2015, las operaciones en los labios fueron el segundo procedimiento facial que más rápidamente aumentó en Estados Unidos desde el año 2000.
En ese año (último lapso en que se hizo un relevamiento) se realizaron más de 27,400 aumentos de labios, un incremento del 48% desde 2000. Significa un aumento de labios cada 19 minutos, y el procedimiento se volvió popular tanto en hombres como en mujeres, según la Sociedad Estadounidense de Cirujanos Plásticos (American Society of Plastic Surgeons, ASAPS).
Además, los hombres de la generación millennials también están impulsando el aumento de las cirugías plásticas en forma acelerada desde 1997, con un crecimiento del 325%, según un informe de 2017 de la AAFPRS.
¿Qué es lo que ellos se quieren retocar? Principalmente la nariz, la papada, las orejas y el pecho.