Millones de mujeres alrededor del mundo utilizan talco a diario después de la ducha como parte de su higiene íntima.
También lo aplican al diafragma o lo colocan sobre las toallas femeninas, sin pensar en que ello implica un riesgo para su salud.
Pero a la vista de los casos que han tomado conocimiento público, muchas mujeres tienen dudas y son muchas las versiones que circulan sobre el potencial peligro. El 21 de agosto de 2017, un jurado de Los Ángeles ordenó a Johnson & Johnson pagar un récord de 417 millones de dólares a una mujer que afirma que el polvo para bebés de la compañía, le provocó cáncer de ovario.
No es la primera vez que esta compañía pierde un juicio millonario por el mismo tema, y ahora hay miles de demandas iniciadas contra la corporación. En febrero, un jurado determinó que la familia de una mujer de 62 años de Alabama, que murió de cáncer de ovario en 2015 después de décadas de usar talco para la higiene femenina, tenía derecho a $ 72 millones por daños, de parte de Johnson & Johnson.
La compañía no informó a los clientes de los peligros potenciales de sus polvos a pesar de ser conscientes de los posibles riesgos para la salud, según el jurado.
Qué dice la evidencia científica
El uso frecuente de talco para bebés en los genitales y su relación con el cáncer de ovarios, es controvertido, hay evidencia que lo relaciona, y expertos que no están de acuerdo.
Los fabricantes se defienden y afirman que no existe una relación causal entre el uso de talco y el cáncer de ovario, y la investigación ha demostrado resultados contradictorios.
La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer, que forma parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS) informa que el uso de talco por parte de las mujeres en sus genitales es "posiblemente carcinogénico para los seres humanos".
Por su parte, la Sociedad Americana del Cáncer analizó la evidencia disponible y concluyó que los "hallazgos han sido mezclados". Algunos estudios informan un riesgo levemente aumentado de cáncer de ovario entre las mujeres que han usado regularmente talco en sus áreas genitales, mientras que otros estudios no han encontrado un mayor riesgo.
Pero hay médicos que afirman tal relación, y tienen pruebas. El Dr. Daniel Cramer, profesor de obstetricia, ginecología y biología reproductiva en la Escuela de Medicina de Harvard y director del Centro de Epidemiología en el Brigham and Women's Hospital de Boston, realizó en 1982 uno de los primeros estudios para probar un vínculo entre el uso regular de talco genital en mujeres y cáncer de los ovarios.
Hay una fuerte evidencia de dos docenas de estudios que certifican una asociación significativa entre el uso de talco genital y el cáncer de ovario, dijo Cramer a Live Science. Éstos han encontrado que el uso regular de talco puede aumentar el riesgo general de una mujer de cáncer de ovario en un 30%, expresó.
¿De qué modo puede influir?
"El talco es un agente inflamatorio potente, y la inflamación crónica puede predisponer a una persona al cáncer" dijo Cramer.
Cramer explicó que varios patólogos examinaron el tejido de los ovarios de las pacientes con cáncer bajo un microscopio y encontraron talco depositado allí.
Al parecer, viaja a través del interior del cuerpo: el talco se puede encontrar también en el tejido de los ganglios linfáticos en las mujeres que han utilizado talco en sus genitales, según Cramer.
El mecanismo exacto por el cual el talco puede promover el desarrollo de cáncer de ovario en las mujeres no se conoce. Pero Cramer sospecha que cuando se aplica a los genitales, las partículas del mineral pueden entrar en la vagina y eventualmente llegar hasta el tracto genital superior, donde se encuentran los ovarios. Una vez allí, el talco puede inducir una potente respuesta inflamatoria y probablemente, interrumpir el sistema inmunológico, dijo.
Por su parte, hay médicos que no coinciden. “La evidencia científica de un vínculo entre el uso de polvos de talco y cáncer de ovario por las mujeres no es tan fuerte”, dijo a Live Science la Dra. Sarah Temkin, de la Escuela de Medicina Johns Hopkins en Baltimore. Dos nuevos estudios prospectivos no han mostrado ninguna diferencia en el riesgo de cáncer de ovario entre las mujeres que usaron talco en sus genitales y las que nunca lo hicieron” señaló.
La fórmula de los polvos de talco
El polvo de talco está hecho de talco, un mineral compuesto principalmente de los elementos magnesio, silicio y oxígeno.
En su forma natural, algún talco puede contener asbesto, una sustancia conocida por causar cáncer en los pulmones cuando se inhala, según la American Cancer Society.
Sin embargo, todos los productos de talco utilizados en hogares de Estados Unidos han estado libres de asbesto desde 1970.
Los polvos a base de almidón de maíz, que no tienen talco, se consideran seguros para las mujeres para usar en el área genital.
Al referirse al tema del uso del talco y su potencial peligro, el Dr. Hal Lawrence, director ejecutivo del Congreso Americano de Obstetras y Ginecólogos (American Congress of Obstetricians and Gynecologists), recordó que los obstetras y los ginecólogos generalmente no recomiendan el uso de irrigaciones, aerosoles vaginales ni polvo de talco para evitar incomodidad o dolor.