Una razón más para que las futuras madres lo incluyan en su dieta: consumir 400 microgramos al día de ácido fólico contribuye a disminuir el riesgo de autismo en los recién nacidos hasta en un 40%, concluye un estudio del Instituto Noruego de Salud Pública, publicado en Jama.
El estudio fue realizado en Noruega, donde no existe la recomendación de enriquecer los productos con ácido fólico. En cambio, en EEUU, los granos, cereales, panes y otros productos se complementan con esta vitamina desde 1998, después de que numerosos estudios mostraron que podría reducir el riesgo de defectos en los recién nacidos.
Puntos clave
Los investigadores estudiaron a 85,000 niños noruegos nacidos entre 2002 y 2008, a los que les dio suplementos de ácido fólico desde que estaban en el vientre materno, a las ocho semanas del embarazo.
Y comprobaron que las mujeres que tomaron el suplemento tenían menos probabilidades de tener hijos con trastornos del espectro autista que las madres que no tomaron suplementos de ácido fólico.
"Las madres que tomaron suplementos de ácido fólico al comienzo del embarazo tenían un riesgo de un 40% menos de tener hijos con autismo, en comparación con las madres que no tomaron ácido fólico", dijo el autor del estudio, el Dr. Pal Suren del Instituto Noruego de Salud Pública.
Es una vitamina B, que ayuda al organismo a crear células nuevas. Todas las personas necesitan ácido fólico. Es muy importante para las mujeres en edad fértil. Si se consume antes y durante el embarazo, puede prevenir defectos congénitos importantes en el cerebro y la columna vertebral del bebé.
Se encuentra en los vegetales de hojas verdes, frutas, guisantes secos, chícharos y nueces. Los panes enriquecidos, los cereales y otros productos hechos con granos también contienen ácido fólico, pero la otra alternativa son los suplementos dietarios, informa la Biblioteca Nacional de Medicina.
La mayoría de las mujeres necesitan 400 microgramos (mcg) de folato cada día, incluso si no están planeando quedar embarazadas; si están embarazadas, necesitan 600 mcg y si están amamantando, necesitan 500 mcg diarios, según la Oficina para la Salud de la Mujer, Departamento de Salud y Servicios Humanos de EEUU.