Cómo actúan
Es muy efectivo ya que tiene un registro menor del 3 % de embarazos no deseados, y adecuado para toda mujer saludable y que no tome medicación que pueda llegar a interferir con la acción de las hormonas. Sin embargo, esta inyección no previene contra enfermedades de transmisión sexual como el HIV y otras, y en caso de riesgo se recomienda el uso de preservativos. Algunas mujeres que las utilizan pueden notar reducción o ausencia del período menstrual, ligero aumento de peso, dolores de cabeza y pechos un poco más flojos.
La FDA de Estados Unidos (U.S. Food and Drug Administration) recomienda tomar precauciones con el uso de la inyección de progesterona. Algunos estudios han evidenciado pérdida de densidad ósea en algunas mujeres, aunque la han recobrado una vez interrumpida la medicación. Para estos casos es necesario consultar al médico acerca de la posibilidad de reforzar la dosis diaria de calcio con una dieta especial o la ingesta de suplementos. Las mujeres fumadoras mayores de 35 años tienen mayores probabilidades de sufrir una pérdida de densidad ósea con este tipo de inyección.
Puntos clave
- Son inyecciones que liberan la hormona que altera el ciclo menstrual de la mujer para que no quede embarazada.
- Se aplica cada tres meses en la parte superior del brazo o la nalga y tiene un 97 por ciento de efectividad.
- Es muy conveniente para quienes son olvidadizas y desmemoriadas a la hora de tomar pastillas.
Estudios del Centro Médico de la Universidad de Maryland informan que no todas las mujeres son aptas para utilizar la inyección hormonal, como por ejemplo las que tienen antecedentes de cáncer de mamas, migraña, enfermedades hepáticas, riesgo de osteoporosis o coágulos en la sangre. Como contrapartida, es un método muy apropiado para aquellas pacientes que olvidan tomar diariamente la píldora anticonceptiva, y es apta inclusive para aquellas que están amamantando. Sin embargo, es recomendable no utilizarla por un lapso mayor a los dos años.
