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Los 10 alimentos del capitalismo

Hasta ahora, los alimentos eran dulces o salados, calóricos o dietéticos, naturales o procesados... pero nunca se los había definido en términos políticos de manera tan directa como lo hizo el presidente Evo Morales, y ante un foro internacional.

El miércoles 20, el mandatario boliviano dijo, en su discurso ante las Naciones Unidas al celebrar el Año Internacional de la Quinua, que este alimento, también conocido como quinoa, que se cultiva en los pueblos andinos desde hace más de 7,000 años, es una alternativa "digna" a la "comida chatarra del capitalismo".

HD | Foto: THINKSTOCK

Puntos clave

La quinua es un grano que fue base de la alimentación de los pueblos pre incaicos, y posee las virtudes de un súper alimento: tiene todos los nutrientes básicos para una buena nutrición, además de ser naturalmente libre de glúten.

Se cultiva en las montañas y soporta todo tipo de climas, es resistente a la sequía y a los suelos pobres, indica la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Según Morales, "este regalo ancestral de los pueblos indígenas representa una alternativa digna a la actual crisis alimentaria". Agregó que "el capitalismo y sus empresas transnacionales buscan imponer comidas globales, producidas masivamente y que contienen ingredientes químicos que causan dolencias como el cáncer".

Aunque polémico, Morales no es el primero que cuestiona la "comida del capitalismo". En su libro "Fast Food Nation: The Dark Side of The All-American Meal", que dio origen a una película, el investigador Eric Schlooser denuncia aberraciones en la cadena de producción de alimentos que terminan en la mesa familiar de cada día.

El autor asegura que existe un complot de las grandes corporaciones, para promocionar los alimentos "rápidos" a todo nivel: desde el adolescente ávido de hamburguesas hasta la cena familiar. Y hacer de ellos alimentos globales, que se inmiscuyan en los planes nutricionales de todas las naciones.

Más allá de teorías conspirativas, el debate existe. Llevellyn Rockwell, del Ludwig von Mises Institute, escribe en su artículo "El capitalismo y la guerra de las hamburguesas", que los alimentos son un arma política, que se utilizan para invadir mercados, no sólo de comidas sino también ideológicos.

En esta supuesta guerra sabrosa, y en base a los autores que han debatido el tema, los 10 alimentos utilizados en estas estrategias de transculturación nutricional y política serían:

1) Hamburguesa. La reina de la "comida chatarra", aunque existe desde el siglo XIX, se consolidó su lugar como plato de comida rápida a mediados de los años 50, con el desarrollo de la vida moderna y la incorporación de la mujer en el mundo laboral.

2) Bacon. Otro ícono de la dieta estadounidense, esta carne curada concentra altísimos niveles de colesterol y grasas saturadas. "The Virginia House Wife", un libro de cocina publicado en 1824 hace referencia al bacon.

3) Pizza. Aunque proviene de Italia, las versiones locales son mucho más sazonadas y han incorporado en las últimas décadas "toppings" calóricos. Las primeras pizzas datan del año 977 después de Cristo y en Estados Unidos en el siglo XIX, con la ola migratoria italiana.

4) Salsa barbecue. Combinación de especias y grasas vacunas, esta salsa para sazonar carnes y cerdo llegó casi con los colonos del Mayflower, en el siglo XVII.

5) Pollo frito. Típica comida del sur —en donde se encuentra el popular anillo regional de la diabetes y los problemas cardíacos—, el pollo frito es una fritura profunda de presas de ave empanizadas. Llega al país desde varias direcciones: a través de colonos escoceses y de ciertas poblaciones africanas.

6) Snacks. Un verdadero invento americano, se trata de pequeñas porciones de alimentos —barras, papas fritas, etc— para comer en distintos momentos del día. Ahora se están promoviendo snacks saludables.

7) Hot Dog. Uno de los príncipes de la comida chatarra, una sola salchicha contiene hasta 600 miligramos de sodio. Lo introdujo un inmigrante alemán en Coney Island hacia 1870.

8) Pastel de Manzanas. El más tradicional de los postres, su versión original, creada hacia el 1700, no tenía azúcar... ahora lleva demasiada. 

9) Macarrones con queso. Aunque la pasta en sí es de origen medieval, el agregado calórico del queso gratinado se origina en Estados Unidos, y también en el Reino Unido y Australia.

10) Pescado frito con papas fritas. Aunque el pescado es un alimento sano, la versión local, también típica del sur del país y popular desde hace dos siglos, agrega el peligroso componente de la cocción frita.

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